El Centro de diseño Sheila C. Johnson (SJDC) de la universidad New School de Nueva York montó una exhibición que narra con objetos abandonados por migrantes la experiencia humana del cruce fronterizo a través del desierto entre México y Estados Unidos.
Titulada “Estado de Excepción”, la muestra está compuesta por objetos recolectados como parte de la investigación del “Proyecto de Migración Indocumentada” de Jason De León, antropólogo de la Universidad de Michigan.
La muestra, concebida por el fotógrafo Richard Barnes y la curadora Amanda Krugliak, en colaboración con De León, incluye una instalación de cientos de mochilas dejadas por migrantes que cruzan el desierto de Sonora, en el sur del estado de Arizona.
La exposición muestra asimismo numerosas piezas de ropa y objetos desechables, así como videos tomados por Barnes a lo largo de la frontera sur de Estados Unidos.
La instalación también incluye extractos de grabaciones originales de entrevistas en audio con migrantes como parte de la obra de De León.
“Ahora más que nunca, después de una campaña presidencial que se alimentó de la retórica anti-inmigrante y xenófoba, es absolutamente crítico profundizar en la experiencia de los inmigrantes”, explicaron Barnes y Krugliak.
Los curadores expresaron que es preciso plantear preguntas sobre el futuro de las miles de personas que huyen de la extrema pobreza, la violencia de cárteles de drogas y la inestabilidad política en América Latina.
“Estado de Excepción honra la pura materialidad de la experiencia migratoria. Estos objetos son fragmentos de una historia de sufrimiento y resiliencia, y las imágenes y las voces revelan la desolación, la esperanza y las pruebas de sus odiseas”, consideraron los curadores.
Por su parte, la directora del SJDC, Radhika Subramaniam, asentó que con esta exposición el Centro de Diseño Sheila C. Johnson se ha convertido en “un estado de inclusión en el que los migrantes son bienvenidos”.
“Estado de Excepción” fue presentada originalmente en el Instituto para las Humanidades de la Universidad de Michigan y ha viajado a Detroit y Grand Rapids, en el estado de Michigan, y a Phoenix, en Arizona.
En cada lugar la exposición se ha actualizado para incluir material nuevo, reflejando y respondiendo al debate público sobre el tema, así como a los esfuerzos continuos para reformar la inmigración en Estados Unidos.
Esta quinta edición presenta nuevos objetos: los neumáticos utilizados por la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos para despejar el terreno y hacer más visibles las huellas del desierto y las fotografías tomadas por los propios migrantes en sus peligrosos viajes.
La exposición fue abierta al público a partir del pasado 3 de febrero y se mantendrá recibiendo visitantes hasta el 17 de abril.