Cerca de tres horas durará el recorrido que el papa Francisco hará en la cárcel de San Vittore, de Milán.
El religioso tiene previsto un reposo de 30 minutos en la habitación que suele usar el capellán de la prisión, Marco Recalcati, además de un almuerzo con cerca de 100 detenidos.
Los organizadores de la visita en el canal católico TV2000 informaron que el Papa pidió que no sea una visita formal, sino una oportunidad para conversar con los detenidos y saludar a “uno por uno”.
Francisco se encontrará con los casi 400 reclusos en el patio de la prisión, donde recibirá sus cartas y regalos.