La Iglesia Católica de México dijo hoy que las empresas que colaboren en la edificación del muro fronterizo propuesto por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, “deberían ser considerados traidores a la patria”.
“Cualquier empresa con intenciones de inversión en el muro del fanático Trump sería inmoral, pero sobre todo, sus accionistas y dueños deberían ser considerados como traidores a la patria”, apuntó la Iglesia en un editorial del semanario Desde la fe.
La Iglesia consideró “lamentable” que haya mexicanos dispuestos a colaborar “con un proyecto fanático” como el muro, que aniquilará la buena relación de dos países que comparten una frontera común.
“Bajo el argumento bondadoso de ser compañías generadoras de empleo, estas empresas buscan obtener ganancias, sin importar las consecuencias. Para ellas, el fin justicia los medios”, acusó.
Criticó lo que llamó “tibieza” de las autoridades económicas de México al considerar que no han mostrado firmeza en contra de estos empresarios.
Sostuvo que la inversión que estas empresas mexicanas pueden hacer en el muro acabará por “nutrir” formas de discriminación que a lo largo de la historia han sometido a millones de seres humanos.
“Prácticamente, unirse a un proyecto que es una grave afrenta a la dignidad, es darse un balazo en el pie”, sentenció.
La Iglesia dijo que aquellos que señalan que EU tiene el derecho de construir el muro son esos “mismos miopes” que no alcanzan a ver que el muro es una “franca amenaza que vulnera las relaciones y la paz social”.
En su editorial, la jerarquía católica destacó que al paso de los meses la política migratoria de Trump se enfrenta a la realidad porque fue “fue fácil la demagogia en campaña”, pero las acciones en la práctica se tornan difíciles ante la notable oposición social.
Criticó la política migratoria del presidente estadounidense al considerar que cuando no existe delito comprobado, toda deportación “es muestra de terror”.
El muro es un “monumento de intimidación y silencio, de odio xenófobo para acallar las voces de trabajadores mal pagados y maltratados, de familias desprotegidas y de personas violentadas”, agregó el editorial del semanario, a la venta los domingos en las iglesias del país.
jram