Migrantes centroamericanos fabrican sus propios impermeables para protegerse de los cambios de temperatura, bajo la supervisión de estudiantes de la licenciatura de Diseño Industrial de la Universidad de Guadalajara.
Clara Jazmín Santos, estudiante de diseño, explicó que se montó un pequeño taller en la Casa del Migrante, ubicado en el Cerro del Cuatro en Guadalajara.
“Se les invita a incorporarse a la producción del producto y, en remuneración por su trabajo, reciben la prenda de manera gratuita. Es como un ganar-ganar para ambas partes, entonces deben hace dos prendas porque es una empresa social, uno es para el migrante y el otro se vende”, consideró Santos en entrevista para 24 HORAS.
Explicó que se ofrece a los mochileros, campistas, “es un producto que también es útil para ellos. Con el dinero que se obtiene se sostiene este negocio con lo que se compra la tela que es nailon tiburón “.
La joven manifestó que el objetivo es ofrecerlo a través de internet ya que es un medio común que utilizan los campistas.
“Queremos que lo consigan por un canal fácil y que ya no tengan que acudir al lugar (albergue), y que se enteren que con sus compra están ayudando a estas personas, en las etiquetas viene la leyenda de que fue realizado con ayuda de un migrante colocándole el nombre y su nacionalidad, ya con esto saben a quién están apoyando”, resaltó.
Santos indicó que tiene un precio de 500 pesos tanto por el material y la mano de obra además de que lleva de un día a dos elaborarlo y el resto de los días los centroamericanos recibe capacitación en corte y confección.
“Se les enseña lo básico en costura y de esta manera, cuando llegan a su destino, ya tienen una fuente extra de trabajo y pueden conseguir un trabajo digno; es un beneficio a largo plazo”, expuso.
La estudiante manifestó que su equipo está interesado en llevar este proyecto a otros albergues: “queremos que alguien nos patrocine, aunque la idea de esta empresa es que sea auto sostenible, obviamente se necesita un capital para comprar todas las máquinas, queremos pulir más detalles y tocar puertas”.
Indicó que la idea esta instalar los talleres a lo largo de la República y un proyecto más ambicioso intentarlo con los refugiados en el continente europeo.
Recordó que en una clase su maestra les pidió un diseño social, más que de consumo, por lo que acudieron a este refugio.
Datos
-La prenda es discreta con el objetivo de que el usuario pueda pasar desapercibido
-Para su confección se utilizan dos metros de tela nailon tiburón, y del sobrante se hace una bolsa para que el cliente pueda guardar y trasladar su impermeable