Por considerar que el nombramiento del fiscal anticorrupción no puede estar sujeto a cuestiones de carácter político, el ciudadano José Bernardo Rafael Espino del Castillo Barrón declinó a su postulación a este cargo, convirtiéndose así en el octavo aspirante que abandona el proceso.

 

Originalmente se inscribieron 32 candidatos, pero sólo quedan 22 interesados en convertirse en fiscal anticorrupción, cargo que deberá definirse antes de que arranque el Sistema Nacional Anticorrupción (19 de julio próximo).

 

En una carta dirigida al senador Fernando Herrera Ávila, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), fechada el 25 de marzo pasado, Espino, titular de la Dirección General de Profesiones de la Secretaría de Educación Pública (SEP), dio a conocer su decisión de declinar al proceso para convertirse en el primer fiscal anticorrupción del país.

 

“Considero que el objeto de la fiscalía debe estar sostenido en la capacidad técnico, jurídico y penal, necesarias para una gestión transparente y legal, sin que se vea afectada su definición por cuestiones de carácter político”, argumentó el ciudadano en la misiva.

 

Asimismo, expresó su agradecimiento por haberle permitido participar en “tan importante nombramiento”.
Espino del Castillo Barrón es uno de los cuatro perfiles con el perfil idóneo para ocupar el cargo de fiscal anticorrupción, en opinión del comité de la sociedad civil que acompañó el proceso de comparecencias de los 23 aspirantes al cargo.

 

La declinación de Bernardo Espino, se dio 10 días después de su comparecencia ante las comisiones unidas de Justicia y Anticorrupción y Participación Ciudadana, en la cual destacó la necesidad de fomentar una cultura de respeto, transparencia, acceso a la información y protección de datos.

 

En ese contexto, considero que el fiscal anticorrupción debe partir de un diagnóstico actual, “a fin de ver debilidades y fortalezas de la institución; además tiene que realizar un ejercicio cercano a los ciudadanos, buscar la profesionalización de sus elementos; la coordinación del Sistema Nacional Anticorrupción y ganar confianza de los ciudadanos”.

 

Espino del Castillo Barrón participó en la primera convocatoria para elegir al fiscal anticorrupción, misma que fue declarada desierta por el Senado de la República. También se inscribió en el segundo proceso, del cual se apartó aunque era uno de los favoritos no sólo de la sociedad civil, sino de los senadores del PRI.

 

 

¿Quién es?

 

Bernardo Espino es doctor en ciencias penales por el Instituto de Ciencias Jurídicas de Estudios Superiores. Desde 2015 se desempeña como director general de Profesiones de la Secretaría de Educación Pública (SEP). Antes, fue gerente de responsabilidades del órgano interno de control de Petróleos Mexicanos y ha tenido diversos cargos en la Procuraduría General de la República

 

 

Los que renunciaron al proceso

 

De los 32 candidatos originales, sólo quedan 22 y éstos son los ocho que renunciaron:

 

1. Ximena Puente de la Mora, presidenta del Inai.

 

2. Miguel Sarre Iguíniz, académico del ITAM

 

3. Jack Rafael Gorodezky Mirsky, licenciado en derecho
4. Fernando Valerio Gutiérrez, licenciado en derecho

 

5. Arturo Jesús Becerra Martínez, doctor en derecho público.
6. Ángel Buendía Buendía
7. Héctor Carreón Perea
8. Bernardo Rafael Espino del Castillo

 

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