Las mayores pérdidas comerciales para Estados Unidos no son con México, sino en la región de Asia. Casi la mitad (47%) del déficit comercial de la Unión Americana es con China, mientras que con México es de apenas 8.6%, de acuerdo con datos de 2016 reportados por la Oficina de Estadísticas de ese país.
El presidente estadunidense Donald Trump prepara su nueva ofensiva para cumplir con uno de sus compromisos de campaña: reducir el déficit comercial de ese país para proteger el empleo de los estadunidenses e impulsar el crecimiento económico, pero lograrlo no será fácil.
En el caso de México, el mandatario estadunidense se propone renegociar los términos del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y si las previsiones del Departamento de Comercio de Estados Unidos se cumplen, en los próximos días dará los primeros pasos de un proceso que podría arrancar en el verano próximo, según ha dicho el secretario de Comercio de ese país, Wilbur Ross.
Para el caso de China, el mandatario se comprometió a señalar a China como un manipulador de divisas, aunque no se conocen los detalles de dicha sentencia en contra de una política adoptada abiertamente por el gobierno de la nación asiática para darle mayor competitividad a sus exportaciones.
En agosto de 2015, el Banco Popular de China decretó el mayor ajuste cambiario en una década; así en una semana el yuan se depreció alrededor de 4.0% frente al dólar, abaratando las exportaciones chinas al resto del mundo, en un intento por reanimar a su economía.
Ese mismo año, el déficit comercial de EU frente al gigante asiático alcanzó un nivel nunca antes visto de 367 mil 173 millones de dólares, aunque el año pasado se redujo ligeramente.
En 2016, Estados Unidos colocó en China mercancías por 115 mil 800 millones de dólares, principalmente aeronaves civiles y soya. En cambio, el gigante asiático vendió en territorio estadunidense bienes, en su mayoría teléfonos móviles, computadoras y equipos de telecomunicaciones, por 462 mil millones de dólares, un monto significativamente mayor.
En relación con México, el año pasado las exportaciones de EU casi duplicaron a las que envió a China. En total, vendió 231 mil millones de dólares, principalmente autopartes y accesorios, aparatos eléctricos y accesorios para computadoras. En sentido inverso, México envió al país vecino autopartes y accesorios; camionetas, autobuses y automóviles para pasajeros, en su mayoría, por un valor de 294 mil 200 millones.
En tanto, el déficit con Japón se debió a que éste país colocó en el mercado estadounidense principalmente autos ligeros, autopartes y accesorios para máquinas industriales, cuyo valor casi duplicó al de las exportaciones de la Unión Americana, consistentes en buena medida en aviones civiles, partes para esta industria, así como medicinas y equipo médico.
Frente a la Alemania, el saldo comercial negativo se debió en gran medida a que las exportaciones de sustancias farmacéuticas, automóviles y autopartes y accesorios provenientes de esta economía superaron por mucho el valor de las importaciones de vehículos, autos, aeronaves civiles, motores y aeropartes, así como material farmacéutico provenientes de Estados Unidos.
Aun con este balance, el Gobierno de Donald Trump ha enfocado sus baterías en México al considerar que el país ha tomado ventaja del TLCAN.
Si las previsiones del Departamento de Comercio de Estados Unidos se cumplen, en los próximos días dará los primeros pasos de un proceso que podría arrancar en el verano próximo, según ha dicho el secretario de Comercio de ese país, Wilbur Ross.