DALLAS.- La Asociación de Vida Silvestre de Texas (TWA), que agrupa a miles de propietarios de tierras, anunció su rechazo a la construcción de un muro a lo largo de la frontera con México, al temer la expropiación de sus terrenos y el deterioro medioambiental y silvestre, entre otras irregularidades.

 

“A la TWA le preocupa que una barrera física a lo largo de la frontera de Texas con México, resulte en una condena sustancial de la propiedad privada por dominio eminente”, indicó la asociación que agrupa a unos 10 mil propietarios de tierras, que poseen unas 16 millones de hectáreas de ranchos y terrenos de arrendamientos de caza.

 

La construcción de un muro “interrumpiría el acceso de los propietarios de tierras, del ganado y la fauna al agua del Río Grande (Bravo) y a los corredores para algunas especies como osos negros, leones de montaña, ciervos cola blanca, venado bura y borrego silvestre del desierto, entre otros”, señaló la asociación en un comunicado.

 

El gobierno federal tiene la autoridad legal de obligar a los propietarios de terrenos a vender propiedades para uso público, a través de un proceso llamado dominio eminente.

 

La posición de la TWA sobre la construcción del muro, se emite luego de que la semana pasada, la Casa Blanca advirtiera que la administración del presidente Donald Trump asumirá las medidas necesarias para adquirir los terrenos que se requieran para la construcción del muro a lo largo de la frontera con México.

 

La TWA indicó que la construcción de barreras físicas se justifica solo “en lugares estratégicos como las áreas metropolitanas”, pero no en las zonas rurales.

 

“La TWA insta encarecidamente al Departamento de Seguridad Nacional a desarrollar y utilizar otros métodos que no sean barreras físicas a lo largo del resto de la frontera”, indicó la asociación.

 

La organización señaló que “el aumento de las patrullas, la aplicación más estricta de las leyes existentes y el monitoreo tecnológico de la frontera logrará el objetivo digno de controlar los pasos fronterizos ilegales, minimizando los impactos sobre los derechos de propiedad privada y nuestros preciosos recursos naturales.

 

DCA