¿Cómo pintan las campañas para el PRI a una semana de haber arrancado?
Bueno, por lo que se refiere a las contiendas por las gubernaturas, tropiezos no han faltado. Sobre todo en el Estado de México, donde el candidato priista Alfredo del Mazo ha tenido sus buenos resbalones; y en Nayarit, a causa de la inesperada detención en Estados Unidos del ex fiscal Edgar Veytia.
Coahuila, en cambio, parece ir sobre rieles. Al menos ahí el candidato priista Miguel Ángel Riquelme la ha librado -con el apoyo del secretario de Gobernación, Miguel Osorio Chong, y de la protesta de importantes empresarios- al haber evitado que se eliminaran -por ahora, y hasta que pasen las elecciones- los aranceles al acero chino.
Luego de estos primeros ocho días, la evaluación de las campañas en el búnker priista deja ver “preocupación” en el Edomex, aun cuando, según sus cifras, Del Mazo todavía encabeza las preferencias por pocos puntos.
Pero las patinadas declarativas del propio candidato y la copia del estilo Peña del ex presidente municipal de Huixquilucan no prenden.
En cuanto a la maquinaria y la organización –que podrían salvarle la elección al PRI-, faltan amarres con Carlos Iriarte y con Ana Lilia Herrera.
Por lo que toca a sus contrincantes, calculan que Josefina Vázquez Mota (PAN) se va a desfondar y que la batalla final la darán con Delfina Gómez, de Morena.
Su apuesta es que, para el día de la elección, los votos panistas –ante el temor de que gane Morena, o sea Andrés Manuel López Obrador– se vayan para el PRI.
En cuanto a Nayarit, consideran que si bien llevan un buen candidato con Manuel Cota, la salida del PRI de Raúl Mejía y su postulación por Movimiento Ciudadano podrían quitarles los puntos que necesitan para ganar.
¿NEGOCIO PANISTA?– Hace unos días se apersonaron en el Senado, 15 comisarios ejidales bajacalifornianos. Iban en representación de 14 mil usuarios agrícolas que protestan por el proyecto Gateway, particularmente de la instalación de la planta cervecera Constellation Brands.
Su preocupación –rayando en la angustia- se relaciona con el agua, porque el compromiso que se hizo con la estadounidense CBRE Economic Incentives Group contempla el suministro anual de 20 millones de metros cúbicos del vital líquido, durante los próximos 50 años.
Agua que, reclaman, ¡no alcanza!, por más que el gobernador Kiko Vega (PAN) diga que hay “suficiente agua”.
“Hablar de agua en Baja California es hablar de seguridad nacional”, advirtió Rigoberto Campos, vocero del Comité Ciudadano de Defensa del Agua en aquella entidad. Somos un valle agrícola, generamos riqueza –indica-, y pregunta: “¿Por qué tan ingratos con el acuífero del valle de Mexicali?”.
Según la denuncia de los ejidatarios, se está construyendo un acueducto para llevar el agua al Parque Industrial, cuyo costo será aproximadamente de 520 millones de pesos. Dicho acueducto, indican, no ha sido validado por la Conagua, ni tiene permiso de la Semarnat.
Y la constructora que realiza la obra, aseguran, es del senador Víctor Hermosillo (PAN).
GEMAS. Obsequio de Inés Castañeda, presidente del ejido Tabasco en Baja California: “Soy agricultor, oficio que requiere mucha presencia física, pero vine hasta acá para presentar mi queja, que me dé justicia y traiga la paz otra vez a Baja California”.