La nutrióloga del IMSS en el Estado de México, Monserrat Vallejo Vilchis, afirmó que el consumo de los pescados y mariscos son fuente de proteínas que reducen el riesgo de desarrollar enfermedades del corazón, depresión y declive mental por la edad.
En un comunicado, la especialista del Hospital de Gineco-Obstetricia 221 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), subrayó que debido a los beneficios y al valor nutrimental que aportan es altamente recomendable incluirlos en la dieta al menos una vez por semana, no solo en tiempo de cuaresma sino todo el año.
Con motivo de la tradición de Cuaresma, la población suele incrementar el consumo de pescados y mariscos, opciones muy nutritivas para el organismo ya que son ricos en ácidos grasos, omega 3 y 6, los cuales favorecen al desarrollo cerebral, especialmente de niños y bebés. Además aminoran factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares al favorecer la regulación de la presión arterial y la frecuencia cardiaca, entre otros.
También son una fuente importante de vitaminas del grupo B (B1, B2, B3, B12), y de las liposolubles A y D (sobre todo en pescados grasos), y ciertos minerales (fósforo, potasio, sodio, calcio, magnesio, hierro y yodo), en cantidades variables de acuerdo al pescado que se trate, detalló la especialista.
La nutrióloga del IMSS señaló que los pescados que se comen con espina y algunos mariscos aportan una cantidad de calcio extraordinaria, por ejemplo, las sardinas proporcionan aproximadamente 400 miligramos por cada 100 gramos; y las almejas unos 128 por cada 100. El contenido medio de calcio del resto de los pescados y mariscos ronda los 30 miligramos por cada 100 gramos. Vallejo Vilchis puntualizó que se debe tener cuidado y poner atención al momento de la compra de dichos alimentos, es importante considerar algunas medidas para garantizar su buen estado: adquirirlos en comercios establecidos que cuenten con las medidas higiénicas y de refrigeración, que presente un buen color, una textura firme y no tenga mal olor.