La situación ya era insostenible para Georgina Rodríguez en su trabajo, tras el noviazgo público con Cristiano Ronaldo, la verdedora de Prada tuvo que dejar su puesto en El Corte Inglés; pues los paparazzis, periodistas y curiosos la acosaban.
Medios de España difundieron que desde la semana pasada, la joven se quedó sin impleo, aunque ahora quiere ser modelo.
En su cuenta de Instagram se observa que no es ajena a las lentes y tiene varias fotos en distintos escenarios, como España y Nueva York, en los que trata de explotar sus ganas de modelar.
De acuerdo El Mundo, como dependienta de Prada en el famoso almacén, Georgina se volvió blanco de los curiosos que le pedían selfies y también de periodistas que le hacían la plática como clientes para sacar información y hacer sus artículos.
La situación orilló a la novia de CR7 a abandonar su carrera como dependienta. Esta es la segunda vez que pierde el empleo por su famoso novio, pues antes la despidieron de una tienda Gucci porque atraía las lentes ante una prestigiada clientela.
dca