Washington. Después del aumento “dramático” en la relación de la deuda de México, al pasar de 53.7% del PIB en 2015 a 58.1% en 2016, el plan para reducirla a 57.2% este año es bienvenida, dijo el director del Departamento de Monitoreo Fiscal del Fondo Monetario Internacional (FMI), Víctor Gaspar.
Esta disminución resultará positiva para la credibilidad ante los mercados internacionales, además de que tendrá un impacto en los costos de financiamiento, dijo el directivo en conferencia de prensa para presentar el más reciente número del reporte Monitor Fiscal.
“El nivel de deuda no es muy alto, desde la perspectiva de estándares internacionales, pero también es cierto que el costo de financiar al gobierno mexicano es relativamente alto”, señaló Gaspar.
Desde 2016, Moody’s, Fitch y Standard & Poor’s bajaron a negativa su perspectiva sobre la calificación de México al considerar la evolución de la deuda. Aunado a lo anterior, la prima de riesgo del país, es decir, el sobreprecio que paga para financiarse en los mercados mantuvo una tendencia de incremento el año pasado, aunque recientemente moderó el ritmo.
Al respecto, el directico del FMI consideró como acertado el plan trazado por México para reducir su deuda hasta un nivel de 54.1% en 2022. Asimismo, reiteró la recomendación de considerar cambios institucionales más profundos, como la creación de un consejero fiscal independiente, lo cual “aumentaría la transparencia del debate en torno a la política fiscal”.
El secretario de Hacienda, José Antonio Meade Kuribreña, participará a partir de hoy y hasta el próximo domingo en las Reuniones de Primavera del Banco Mundial (BM) y del FMI en la capital estadounidense, el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) se reunirá con sus homólogos de otros países y autoridades de los principales organismos financieros internacionales e inversionistas. Además, acudirá a reuniones de la banca.
Las Reuniones de Primavera del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional congregan cada año a ministros de Finanzas, autoridades de bancos centrales, inversionistas e intermediarios financieros y representantes de círculos académicos.
El objetivo de estos encuentros es debatir los principales temas de la agenda internacional, como el crecimiento económico mundial, la estabilidad financiera internacional, el combate a la pobreza y la cooperación para el desarrollo.