Los mexiquenses recuerdan haber escuchado alguna propuesta para resolver sus problemas.
Los distintos candidatos recuerdan presentar propuestas al respecto.
“Gobierno solidario con la gente”, “Prisión perpetua para secuestradores, feminicidas y pederastas”, “Crear una policía del transporte”, “Acabar con el gobierno de privilegios”, “Gobierno austero, honesto, ético, eficiente y eficaz”, “Reducir gastos suntuosos”, “Mejorar la calidad de vida de los mexiquenses en educación, salud, derechos humanos, equidad de género, desarrollo social, económico y rural, medio ambiente, transparencia y acceso a la información”, “Mejores salarios”, “Alumbrado público en toda la entidad”, “Construcción de tres líneas del Metro”, “Pensión universal para adultos mayores”, “Becas para jóvenes y madres solteras”, “Seguro de desempleo”, etcétera, etcétera.
Ésos fueron algunos compromisos de campaña hace seis años de los distintos candidatos.
Hoy, rumbo al 4 de junio, los electores mexiquenses siguen teniendo “ese problema” y siguen escuchando las mismas propuestas:
“Salario rosa”, “Trabajos cerca del hogar”, “Menos impuestos”, “Crear observatorio ciudadano para señalar extorsión e inseguridad”, “Mejor desarrollo social”, “Seguridad en el transporte”, “Apoyo a mujeres”, “Crear empresa en 24 horas”, “Transporte para estudiantes, discapacitados y adultos mayores”, “Reducir 95% los impuestos para quienes establezcan empresas en la entidad”, “Apoyar al campo y tecnificarlo”, “Certeza jurídica a la tenencia de la tierra”, “Hacer del sector salud mexiquense el mejor del país”, “Medicinas y personal suficiente, modernizar instalaciones y bono de productividad”, ”Agua de calidad para todas las familias”, “Más cámaras de vigilancia”, etcétera, etcétera.
Prometer no empobrece, mentir tampoco, hacerle al Judas, menos.
Y las campañas siguen.
Milonga: el gobierno de la Ciudad de México recoge palabras perdidas para anunciar el aumento de un peso al transporte concesionado (microbuses-vagonetas) que se aplica desde ayer; apostaron todo y todo lo perdieron. La factura se pasará pronto.
aarl