CORNELLA DE LLOBREGAT, BARCELONA. El Barcelona se llevó los tres puntos del derbi contra el Espanyol en Cornellà-El Prat (0-3), un partido marcado por un claro error del anfitrión en el primer gol, obra Luis Suárez poco después del descanso, que rompió la igualdad y permitió a los azulgrana engordar el resultado.
Este resultado invita a los de Luis Enrique a seguir en la lucha por la Liga junto al Real Madrid, mientras que deja al equipo local sin opciones de clasificarse para Europa. Los de Quique Sánchez Flores no pudieron acabar con la racha de más de diez años sin vencer al rival ciudadano en su estadio.
A los cinco minutos, el Espanyol dispuso de una ocasión clarísima. Caicedo arrancó por la banda izquierda y asistió a Jurado, libre de marca y a escasos metros de Ter Stegen. El gaditano intentó un disparo cruzado, pero lo mandó fuera. Los blanquiazules iban muy en serio en el derbi.
La intensidad del anfitrión era mucho mayor que la del Barcelona en estos primeros compases. El ritmo del choque provocaba más imprecisiones de lo habitual en el juego azulgrana, aunque poco a poco el reloj se afinó. Ya se intuían las diabluras de Messi y empezaban los avisos con tiros lejanos de Neymar y Rakitic.
A partir del minuto 20, los de Luis Enrique se instalaban con facilidad en el campo del Espanyol, aunque sin disfrutar de oportunidades claras. La defensa local mantenía a raya al mejor ataque de la competición. El cuadro blanquiazul, por su parte, se aferraba a las contras para intentar sorprender al rival.
El choque estaba en tablas. El Barcelona no chutó entre los tres palos en toda la primera mitad, aunque los de Quique Sánchez Flores se conformaban con la ocasión fallada de Jurado a los cinco minutos. La intensidad y la seguridad local atrás impedía brillar a la pólvora visitante.
En la reanudación, sin cambios, el Espanyol apostaba por mantener la misma receta. Pero un error de Jurado en el minuto 50 cambió por completo el escenario. El centrocampista firmó un pase muy lento a Diego López. Luis Suárez aceptó el regalo, se adueñó del balón y superó al meta.
El 0-1 rompió el orden del anfitrión. Las incursiones de la MSN eran más numerosas y Piqué y Umtiti estaban imperiales en el eje de la defensa del Barça. El control, ahora sí, era de los de Luis Enrique, más allá de un latigazo de Jurado desde la frontal que examinó el posicionamiento de Ter Stegen.
Sólo era cuestión de tiempo hasta que los intentos del Barça funcionaran. Y más cuando Messi dispuso de un carril para escaparse con habilidad y velocidad desde los tres cuartos del campo y asistir a Rakitic para que batiera con facilidad al portero gallego (0-2). El argentino hizo que pareciera fácil.
Era el minuto 77 y el 0-2 supuso la sentencia. Luis Enrique apuntaló su planteamiento defensivo con Mascherano para evitar sorpresas, mientras los delanteros azulgranas insistían. La victoria era azulgrana, pero no hubo tregua. Luis Suárez marcó el 0-3 en el 87 al recoger un mal despeje de Aarón dentro del área.
JMS