El argentino Gonzalo Higuaín, asistido por el brasileño Dani Alves, anotó por partida doble en el Stade Louis II y allanó el camino del Juventus  para la final del Cardiff al vencer al Mónaco por 0-2 en la ida de las semifinales.

 

Higuaín, con dos tantos a un toque en los minutos 29 y 59’, rompió su sequía de seis meses en la máxima competición continental y se erigió, por fin, en una figura determinante en la cuarta semifinal que participaba, después de las tres jugadas con el Real Madrid (2011, 2012 y 2013).

 

Con este resultado, la Juventus, que defenderá un cómodo 0-2 en su estadio en una semana, se perfila como finalista en Cardiff, donde el Real Madrid también se acercó gracias a su claro triunfo en la ida de las semifinales ante el Atlético de Madrid (3-0).

 

El Mónaco, cuya estrella Kylian Mbappé estuvo participativo en el primer periodo, pero apagado en el segundo, quedó maniatado por la sobriedad y efectividad del campeón italiano, que solo ha recibido dos goles en 11 partidos de la presente Liga de Campeones.

 

Con su orden táctico y experiencia, el Juventus, dos veces campeón europeo, demostró porqué está considerado uno de los mejores equipos del continente.

 

Sin embargo, fueron los locales -finalistas en 2004- los que remataron más a puerta durante el primer periodo.

 

Mbappé, que a sus 18 años acumulaba 18 goles en los últimos 18 partidos, cabeceó flojo a pocos metros de Buffon, quien tuvo que intervenir después a la más clara ocasión de los locales.

 

La Vecchia Signora, dominadora del cuero, fue altamente precisa en sus ataques y efectiva a la hora de frenar los embates de los monegascos.

aarl