El joven mexicano de 18 años Julián Ríos ganó 20.000 dólares por lograr el primer lugar en el certamen Global Student Entrepreneurs’ Awards con su proyecto Higia, empresa mexicana de biosensores que detectan el cáncer de mama, informó hoy la entidad organizadora del concurso.
A partir de Higia, Ríos y su equipo diseñaron “Eva”, un sostén que detecta el cáncer de mama mediante un dispositivo que registra datos térmicos.
Los países que llegaron a la final en Alemania además de México, nación que participaba por séptima vez en este certamen y que gracias a Ríos consiguió el primer lugar en esta edición, efectuada del 27 al 29 de abril en Fráncfort, fueron El Salvador, Guatemala, Malasia y Pakistán.
El certamen Global Student Entrepreneur’, que en esta edición contó con la participación de 1.700 competidores de más de 50 países, es la competición global por excelencia para los estudiantes que poseen un negocio con fines de lucro o una empresa social.
Ríos empezó buscando en internet “¿Qué es el cáncer?” y poco después consiguió diseñar, junto con tres compañeros, un dispositivo que detecta el cáncer de mama gracias a biosensores y que cualquier mujer puede usar fácilmente colocándolos dentro del sostén.
En 2015, Ríos se decidió a inventar un método que ayudara a detectar el cáncer de mama superando las limitaciones de los métodos convencionales, explicó en marzo pasado el estudiante de preparatoria del Tecnológico de Monterrey en una entrevista con Efe.
José Antonio Torres, cofundador y director de tecnología de la empresa, explicó en marzo pasado el funcionamiento del dispositivo, que registra las temperaturas anormales que se dan en los senos con la presencia de quistes, calcificaciones y tumores malignos.
“Eva” se usa una hora a la semana durante un mes para almacenar datos de la usuaria, que se pueden monitorear con una aplicación en el celular. “Entre más datos tengamos de la mujer, mejor se hace el algoritmo para pronosticar el cáncer”, precisó Torres, de 20 años.
Hay otros factores independientes al cáncer que influyen en la temperatura corporal. “Sin embargo, es fácil controlarlos”, agregó su compañero.
El algoritmo tiene una eficacia en el diagnóstico de 93 %, “que es bastante elevado en comparación de otros elementos como la exploración y el ultrasonido, que oscilan entre el 20 y el 50 %”, relató Ríos, también director ejecutivo de Higia.
En un escenario óptimo, “Eva” saldría a la venta a finales de 2018, pero todavía tienen que conseguir las autorizaciones correspondientes de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), lo que podría demorar el proceso.