RÍO DE JANEIRO.- La producción de vehículos en Brasil se recuperó en los cuatro primeros meses de 2017, aunque sigue lejos de los datos de antes de la recesión, mientras la venta de autos sigue en caída y México –primer productor de América Latina– está ahora cerca de ser el mayor mercado.
En Brasil, la producción total de vehículos (autos y camiones) se situó en abril pasado en 191 mil unidades, 18.8 por ciento menos que en marzo, pero en los primeros cuatro meses del año acumuló un crecimiento del 20.9 por ciento respecto al mismo periodo de 2016 (801 mil frente a 663 mil del año pasado).
“Todavía tenemos ociosidad en las fábricas, pero la tendencia es a la mejora”, dijo este viernes Antonio Megale, presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automotores de Brasil (Anfavea).
La crisis en Brasil provocó una caída del Producto Interno Bruto (PIB) del 7.2 por ciento en dos años, un duro golpe para una economía que hoy suma 14 millones de desempleados y cuya industria es el sector más afectado por la recesión.
En ese escenario, el sector automotriz es probablemente uno de los más afectados, no sólo por los más de 30 mil puestos de trabajo directos perdidos, sino también por el estancamiento en la producción y las ventas a niveles de hace más de una década.
Los productores admiten que las ventas aún no han tocado fondo, a pesar de la expectativa de que en 2017 la mayor economía de América Latina dejará atrás la contracción económica.
“La tendencia es de estabilización, pero todavía no llegamos ahí”, sostuvo Megale, al comentar la caída del 2.4 por ciento en las ventas entre enero y abril de este año, respecto al mismo periodo de 2016.
Esta situación de crisis económica provocó que en 2014 Brasil perdiera su puesto como mayor fabricante de América Latina, en favor de México, tendencia que desde entonces se ha acelerado.
La situación del sector automotriz es resultado de las diversas estrategias adoptadas por los dos gigantes latinoamericanos.
Brasil se focalizó históricamente en su mercado interno, protegiendo con aranceles su sector y forzando a las montadoras a invertir en fábricas si querían acceder a un mercado de 207 millones de personas.
Mientras que en México, las exportaciones a Estados Unidos y Canadá –destino de más del 75 por ciento de los autos vendidos al exterior- se sigue manteniendo como el gran motor de la industria automotriz nacional, que registra mes tras mes números históricos.
Ahora un nuevo vuelco puede producirse, aunque sea temporal: el ascenso de México a primer mercado de vehículos de América Latina, a pesar de que Brasil tiene 80 millones más de habitantes.
La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) publicará el próximo lunes sus datos de producción y ventas hasta finales de abril, pero los datos parciales reportados este viernes en Brasil apuntan a que México podría haber superado las ventas nacionales del país sudamericano.
DCA