MANCHESTER.- Una niña de 8 años y una joven de 18, ambas británicas, son las primeras víctimas mortales identificadas hoy del atentado suicida que mató a 22 personas anoche tras un concierto en Manchester de la cantante Ariana Grande.

 

La niña Saffie Rose Roussos había asistido al concierto en el Manchester Arena con su madre, Lisa Roussos, cuando un terrorista hizo estallar un artefacto de fabricación casera, según han confirmado las autoridades del condado de Lancashire, al norte de Inglaterra.

 

El director de la escuela primaria a la que asistía la menor, Chris Upton, la describió como “simplemente una maravillosa niña pequeña”.

 

“La quería todo el mundo. Su calidez y amabilidad se recordarán con cariño. Saffie era callada y modesta, con un toque creativo”, dijo Upton, que describió la muerte de la niña como una “tremenda conmoción”.

 

La segunda víctima identificada es Georgina Callender, una estudiante de 18 años que asistía al centro de educación superior Runshaw College en Leyland, al noroeste de Manchester.

 

“Nuestro más sentido pésame, pensamientos y plegarias se dirigen hacia la familia de Georigina, sus amigos y todos aquellos afectados por esta pérdida”, afirmó un portavoz del centro educativo.

 

El diario local “Manchester Evening News” ha recaudado cerca de 200.000 libras (230.000 euros) en una campaña a través de internet para ayudar a la familia de Callander.

 

dca