BRASILIA.- Una masiva protesta convocada por sindicatos para exigir la renuncia del Presidente de Brasil, Michel Temer, acusado de corrupción, derivó en hechos de violencia que colapsaron la capital brasileña.

 

El Partido de los Trabajadores (PT), la formación fundada por el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva y principal fuerza de la oposición, criticó la violencia con que la policía dispersó la protesta frente a la sede del Congreso.

 

La protesta reunió a por lo menos 40 mil manifestantes, según la policía, y fue empañada por los incidentes violentos provocados por encapuchados que supuestamente se infiltraron entre los manifestantes y que atacaron las sedes de algunos ministerios y llegaron a provocar un incendio en la sede del Ministerio de Agricultura.

 

Temer autorizó que miembros de las Fuerzas Armadas reforzaran la seguridad en las edificaciones públicas de Brasilia luego de que la policía respondiera a los ataques vandálicos con gases lacrimógenos y balas de goma.

 

Temer está en el ojo del huracán desde la semana pasada por las confesiones de directivos del grupo empresarial JBS que lo implican directamente en hechos de presunta corrupción, por los que la Corte Suprema ha decidido iniciar una investigación.

 

El mandatario, que en los últimos días ha perdido el apoyo de diversos sectores de su propia base parlamentaria, ha advertido que no renunciará y su defensa presentó ayer un recurso ante la Corte Suprema para intentar evitar que sea obligado a prestar testimonio ante la Policía en la investigación que le fue abierta por corrupción.

 

aarl