El cuadro anfitrión hace ya varios años que no logra triunfos importantes a nivel internacional y es una gran oportunidad para empezar a hacerlo, sobre todo si se toma en cuenta que está a un año de la Copa del Mundo 2018.
El técnico Stanislav Cherchésov es consciente que la confianza del aficionado, por más optimista que sea, no es precisamente la mejor, por ello necesita dar un primer golpe que le permita aspirar a la siguiente fase.
Como equipo anfitrión de la justa mundialista el cuadro europeo no toma parte de la eliminatoria, por lo que solo disputa partidos amistosos, algo que siempre afectará en el tema de la competencia y lo que esto representa.
Mientras que los “All Whites” han disputados dos ediciones de Copa Confederaciones, pero de seis partidos jugados, en ninguno ha sido capaz de conseguir un triunfo, un pendiente con el que quieren terminar en su debut.
Anthony Hudson, estratega del representante de Oceanía, sabe que una buena actuación en esta justa les abre un gran panorama para amarrar su boleto al Mundial y ya ahí conseguir un resultado histórico.
Para avanzar a la siguiente fase los neozelandeses necesitan lograr un triunfo, porque en teoría es inferior a Portugal y México, partidos en los que les sería complicado sumar.
La cancha del estadio de San Petersburgo será el escenario donde se podrá en marcha esta competencia, cuando las manecillas del reloj dicten las 18:00 hora local (12:00 del centro de México), en actividad del Grupo A.
DCA