La armadora estadunidense Ford informó que “está casi concluido” el acuerdo con el gobierno de San Luis Potosí sobre el finiquito que deberá pagar por dar marcha atrás al proyecto de construcción de una planta en esa entidad.

 

“Estamos aguardando por la revisión de los documentos por el área legal del gobierno del estado”, respondió la automotriz estadounidense vía correo electrónico.

 

La firma fue consultada luego de que el martes canceló también el plan para trasladar a la planta de Hermosillo la producción del nuevo Focus, que actualmente realiza en Michigan, para llevarla a China, la automotriz. Originalmente, ese modelo se fabricaría en el complejo de San Luis Potosí que se construiría con una inversión de mil 600 millones de dólares y que fue cancelado en enero pasado.

 

A cinco meses del anuncio sigue pendiente el tema de la compensación que deberá cubrir la automotriz. Los términos del acuerdo se esperaban para finales de mayo pasado, según lo había anunciado el secretario de Desarrollo Económico de San Luis Potosí, Gustavo Puente Orozco, y quien había adelantado que buscarían recuperar los 500 millones de pesos que invirtió la administración potosina.

 

La armadora tendría que regresar el terreno de 280 hectáreas al estado, así como los gastos que hizo el gobierno estatal por la donación del predio, la escrituración, los anticipos para el surtimiento de energía y gas natural, así como las plataformas para colocar la estructura de la planta.

 

Unos días después del anuncio de Ford, Puente Orozco declaró que ya había empresas interesadas en adquirir parte del predio.
Cerca del lugar donde se ubicaría el complejo de Ford, la armadora alemana BMW construye una planta con mil millones de dólares, además de que Goodyear Tire & Rubber alistan una planta de neumáticos con una inversión de 550 millones de dólares.

 

aarl