Salomón Chertorivski, secretario de Desarrollo Económico de la CDMX. La nueva terminal aérea sería “la última oportunidad para impulsar un proyecto de regeneración urbana de gran escala” en la zona Oriente, que incluye crecimiento vertical. Se perfila vocación lacustre para el predio actual del aeropuerto Alejandro Ramos M.
La mudanza del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) abre la oportunidad para realizar un reordenamiento urbano en la zona oriente que puede convertirse en el más grande de todo el Siglo XXI.
Así lo destacó Salomón Chertorivski, secretario de Desarrollo Económico de la Ciudad de México, quien no dudó en que el modelo de planeación en el oriente de la metrópoli es tan importante como la política de cero asentamientos humanos en el territorio agrícola de la región sur.
El funcionario también reconoció que la capital necesita de un nuevo aeropuerto para estar mejor conectado a escala mundial, y cuya infraestructura eleve la competitividad del país en materia comercial, económica y turística.
Además, propuso detonar un cambio urbano en el oriente de la urbe bajo el principio de planificación de suelo e inversión; transparente.
El AICM no sólo está rebasado, sino que quedó enclavado en una zona densamente poblada y empobrecida. ¿Urge su salida?
Antes preciso un contexto: El AICM está saturado, es peligroso por estar dentro de la zona urbana-habitacional, origina constante contaminación auditiva para miles de familias, y la actividad económica del aeropuerto no estuvo vinculada con su entorno. Es decir, de las 39 colonias que rodean la terminal aérea sólo tres tienen alguna actividad relacionada con el aeródromo. Además, el uso de suelo no permite actualmente crecer verticalmente en esta región, de tal forma que el valor promedio del suelo es menor en esta región oriente que en cualquier otra zona de la urbe. Sin duda, el AICM debe de salir, ya no le conviene a la ciudad ni a los habitantes del oriente tenerlo ahí.
¿El proyecto del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAICM) representa la gran oportunidad para transformar la región oriente?
Tal vez es la última oportunidad para impulsar un proyecto de regeneración urbana de gran escala. El actual aeropuerto se encuentra en un lugar estratégico para la movilidad urbana, de Norte a Sur, y de Oriente a Poniente. Sólo de los municipios conurbados: Ecatepec, Nezahualcóyotl y Chimalhuacán vienen a trabajar a la ciudad más de 750 mil personas diariamente. Por eso es muy importante un plan de desarrollo orientado al transporte público.
¿Por dónde va la estrategia de regeneración urbana del Gobierno capitalino en el polígono del actual AICM?
Por instrucciones del jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, se promovieron dos foros de análisis conocidos como “La Opinión de la Ciudad”, con científicos, especialistas (nacionales y extranjeros), ciudadanos y autoridades para barajar diversos proyectos para lograr la transformación urbana de las 710 hectáreas del terreno del aeropuerto. Y hace dos meses se concluyó la segunda Opinión de la Ciudad.
Entre las propuestas recibidas sobre qué hacer con los terrenos del AICM destacan: Nuevo Centro Urbano Ciudadano y Gubernamental, Parque Ecológico, con espejos de agua; Nueva Alameda para el Valle de México, Centro educativo, de congresos y de salud.
¿Se establecieron prioridades en las conclusiones del segundo foro?
Así es y podemos resumirlas de la siguiente manera:
1.- La mudanza del AICM brinda la oportunidad de promover un plan de agua con el fin de revertir un error de hace 500 años que fue desecar los lagos. Es el momento de reconciliarnos con el agua, pues el aeropuerto está enclavado en la zona más baja del ex Lago de Texcoco y por eso en el sitio existen grandes bombas para extraer el agua cuando llueve muy fuerte. La propuesta se enfoca a reinundar el espacio del AICM. Se trata de un proyecto de agua y aún no se define si será recreativo. Todo esto se debe realizar en acuerdo con el Gobierno federal.
2.- Promover un plan de sustentabilidad y de remediación del suelo, ya que por más de 60 años se han desplazado maquinarias y aviones, y se ha utilizado en forma constante el combustible y aceites.
3.- Impulsar un proyecto megametropolitano de movilidad y de transporte para devolver la centralidad al transporte público moderno.
4.- Detonar un plan de desarrollo económico en el entorno del AICM y aprovechar para extenderlo en toda la región oriente de la metrópoli. La intención es llevar los mismos estándares de inversión, infraestructura y salarios como los tiene la zona Centro, pues el actual aeropuerto sólo está a cinco kilómetros el Zócalo.
¿Desde esta óptica se vislumbran más oportunidades con la salida del AICM?
Diversos estudios de especialistas demuestran que la zona ofrece muchas posibilidades de desarrollo de forma integral. Hoy es una zona deprimida, pero con gran potencial de crecimiento en todos los ámbitos de una ciudad moderna. Hablamos de un polo económico en el que se contemplan planes de densificación, crecimiento vertical y generación de nuevas actividades económicas.
¿Existe comunicación y cooperación entre el Gobierno de la CDMX y la Federación sobre el proyector del NAICM?
Tenemos muy buena comunicación con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) en lo referente a la infraestructura estratégica con el nuevo aeropuerto. Pero, lamentablemente, no hemos tenido el mismo resultado con la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), que encabeza Rosario Robles, y esto impide que se instalen mesas de trabajo para analizar los proyectos de desarrollo urbano que se detonarán con el NAICM.
¿Seguirán buscando el contacto con Rosario Robles?
Tenemos instrucciones del jefe de Gobierno de mantener con el Gobierno federal los mecanismos de coordinación y diálogo institucional. Nosotros insistiremos en ese contacto y promovemos la reinstalación de la Comisión Metropolitana de Asentamientos Humanos (COMETAH), que reúne a la Federación, gobiernos locales y municipios conurbados.
Pide elevar el salario mínimo
Salomón Chertorivski, titular de la Sedeco, dijo que es urgente y éticamente responsable elevar de 80 pesos a 93.41 el salario mínimo con el fin de llegar a la canasta alimentaria.
“Hemos demostrado y corroborado que el incremento reactiva la economía interna, pues al aumento va al consumo. Ya ocurrió con el incremento de ocho pesos al salario mínimo, que el Gobierno federal dio en diciembre pasado, pero hace falta un poco más”, sostuvo.
“Ya existen coincidencias en incrementarlo, tanto de las cúpulas empresariales, sindicatos y autoridades locales y federales, pero hace falta dar el otro paso. No quiero culpar a nadie, se trata de una decisión tripartita”, planteó.
¿Crítica con dedicatoria?
“Resulta lamentable ver que aún hay gente que no acepta el nuevo aeropuerto. La CDMX ya no está para parchar aeropuertos, se requiere uno para esta megaciudad con alta capacidad de infraestructura para competir mundialmente”.
aarl