José Susumo Azano Matsura, presuntamente involucrado en la venta del sistema Pegasus a través de su empresa Security Tracking Devices en el sexenio de Felipe Calderón, se encuentra en Estados Unidos, a la espera de una sentencia por supuestamente financiar campañas políticas en ese país.
El diario estadounidense San Diego Union Tribune publicó hace unos días que el juez de distrito de San Diego, Michael A. Anello, rechazó un cúmulo de mociones, así como la petición de un nuevo juicio, por lo cual, se prevé que en los próximos días sea sentenciado y alcance 35 años de prisión.
En febrero de 2014, agentes del FBI detuvieron en San Diego California, EU, a Susumo Azano; y en septiembre de 2016, fue acusado formalmente de 35 cargos.
Al empresario mexicano, identificado como el principal distribuidor de sistemas de espionaje en la administración de Calderón, le fincaron una fianza de cinco millones de dólares para llevar su proceso en libertad y le colocaron un sistema GPS para monitorear sus movimientos.
Susumo fue encontrado culpable de contribuir con 600 mil dólares para las campañas políticas del republicano Bob Filner y la fiscal republicana Bonnie Dumanis en 2012. En Estados Unidos es ilegal que un extranjero aporte recursos a candidatos.
A su vez, el diario Los Angeles Times informó que el empresario mexicano también tiene un juicio pendiente por portación de arma de fuego y resaltó que su nuevo abogado, Knut Johnson, buscará apelar la sentencia que le impongan y pedirá su absolución, con el argumento de que ignoraba que, como extranjero, tenía prohibido donar dinero a campañas.
Presencia en México
La empresa de Susumo Azano, Security Tracking Devices, habría sido la principal proveedora de sistemas de inteligencia e espionaje a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) durante el sexenio del panista Calderón.
De acuerdo a diversos registros de prensa, los contratos fueron por más de cinco mil millones de pesos, y uno de ellos habría sido para vender al Gobierno mexicano el sistema Pegasus, con el cual (en su versión actualizada) fueron supuestamente espiados periodistas y defensores de derechos humanos de nuestro país, de acuerdo a la investigación del diario estadounidense The New York Times.
A la fecha, la compañía de Susumo Azano tiene investigaciones abiertas por lavado de dinero a través de empresas fantasma, y por contratos firmados con la Defensa Nacional, a través de la carpeta UEIORPIFAM/AP/079/2014.