El 25 por ciento del total de armas que han entregado en los programas de desarme voluntario en todo el país, provienen de la Ciudad de México, lo que la convierte en la primera entidad en desarme voluntario, aseguró el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera Espinosa.
Durante el evento en que se promulgo y publicaron reformas a diversas leyes en materia de desarme, así como la develación de la escultura “Alas de la Paz”, de Jorge Marín, el mandatario capitalino destacó la participación de la iglesia católica, pues generaron la confianza necesaria para que los ciudadanos accedieran al desarme.
Mancera Espinosa se refirió al programa de entrega de armas voluntario como uno de las acciones más potentes de todo el País.
“Hay un ingrediente que no puedo dejar de agradecer, el que las armas se entregaran en un ámbito de seguridad ciudadana, y ese ámbito se lo dieron las parroquias de la Ciudad, la gente se sintió confiada, se sintió tranquila de poder llevar las armas”, dijo.
Destacó que la participación de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal ha sido muy importante, pues ya no dejará un programa, sino una ley para que el siguiente gobierno se ocupe de lograr el desarme de la Ciudad.
Una sociedad armada, afirmó, puede ser una violenta en cualquier momento, “debemos desarmar a México, debemos lograr que esta ley que está aprobada en la Cámara de Senadores y que esperamos que corra la misma suerte en la Cámara de Diputados, debemos todos de presionar para que no haya armas en la sociedad”.
Las armas, abundó, no las necesita la sociedad civil, tenerlas implica que exista peligro para cualquier persona, pues éstas deben ser únicamente para las instituciones.
Al inicio del evento, fue develada la escultura Alas de la Paz en el patio de entrada del Museo de la Tolerancia, su autor es el artista Jorge Marín, y fue realizada con las armas que se obtuvieron del programa de desarme voluntario.
jram