Murray y Nadal caminan seguros en Wimbledon, después de que ambos solventaran sus compromisos en la segunda ronda, con victorias ante Dustin Brown, y Donald Young.
Nadal sumó su segundo triunfo este año al vencer a Young y colocarse en los dieciseisavos de final, exhibiendo por momentos un gran tenis. Murray dio una clase al temperamental e intuitivo germano de origen jamaicano Brown, verdugo del español en la segunda ronda de 2015.
En su regreso a la pista central, después de que hace dos años Brown le apeara precisamente, Nadal cuajó una gran actuación para hacerse con la victoria en dos horas y once minutos.
Nadal tiene tomada la medida a Young, jugador de 27 años, 43 del mundo, a quien había ganado ya dos veces, siempre en el Masters 1,000 de Indian Wells, 2008 y 2015, sin ceder un set en ambas ocasiones.
El español, certero y seguro en el saque como pocas veces, y con una gran agresividad, solo tuvo problemas con los vendajes de sus dedos, por lo que pidió fisio en dos ocasiones, más que con el rival que tenía delante.
Con un 65 % de acierto en el primer servicio, cinco roturas, y cediendo solamente una vez su saque, ganando 27 puntos en la red, y en total con 37 ganadores, Nadal salió contento de su regreso a la central.
El zurdo de Manacor se enfrentará en la tercera ronda contra el ruso Karen Khachanov, discípulo del español Galo Blanco, que derrotó al brasileño Thiago Monteiro.
Algo más adelante, y por la misma parte del cuadro de Nadal asoma ya el luxemburgués Guilles Muller, décimo sexto favorito, verdugo del jugador español en la segunda ronda de 2005, con quien debería medirse en octavos.
caem