La regiomontana Jaguar Exploración y Producción de Hidrocarburos se alzó como la gran ganadora de las rondas petroleras 2.2 y 2.3. De los 24 bloques ofrecidos para campos terrestres en ambas licitaciones, la empresa se adjudicó 11, seis en consorcio y cinco de manera individual.
La empresa creada en 2014, que tiene como director a Javier Zambrano González, pertenece a Grupo Topaz, un fondo de capital fundado en 2011 por Dionisio Garza Sada y su padre Dionisio Garza Medina. Éste último fue hasta 2010 presidente de Grupo Alfa, un conglomerado de empresas con intereses en los sectores de aluminio, derivados del petróleo, autopartes, alimentos y las telecomunicaciones.
En una maratónica jornada de casi 12 horas, la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) licitó 24 áreas contractuales en campos terrestres predominantemente gasíferos, de las rondas 2.2 y 2.3. Un total de 28 licitantes quedaron inscritos.
La Ronda 2.2 incluyó 10 áreas localizadas en las cuencas petroleras de Burgos, que comprende los estados de Nuevo León y Tamaulipas, y donde habría gas húmedo. La Sureste, ubicada en Tabasco, se proyecta que contenga crudo súper ligero y gas seco.
De las 10 áreas, tres quedaron desiertas, seis se adjudicaron al consorcio formado por la mexicana Jaguar Exploración y Producción de Hidrocarburos y Sun God Energía de México, subsidiaria de la canadiense Sun God Resources, con sede en Calgary.
Sólo el área 1 fue para el consorcio mexicano que integran Iberoamericana de Hidrocarburos (creada en 2007) y Servicios PJP4.
En el caso de la Ronda 2.3, se incluyeron 14 áreas contractuales para exploración y extracción en las cuencas petroleras de Burgos, Tampico-Misantla, Veracruz y del Sureste, que abarcan a los estados de Nuevo León, Tamaulipas, Veracruz y Tabasco. El total de los bloques resultó adjudicado, cinco de estos a Jaguar Exploración y Producción de Hidrocarburos, que concursó de manera individual.
Los resultados superaron el pronóstico del secretario de Energía (Sener), Pedro Joaquín Coldwell, quien hace unas semanas había señalado que por tratarse, esencialmente, de campos de gas, cuyo precio es bajo, se esperaba un promedio de adjudicación entre 25% y 30% entre ambas.
SLIM, SE HACE DE DOS CONTRATOS
Otra mexicana ganadora fue Carso Oil and Gas, del magnate mexicano Carlos Slim, que tras no obtener un solo bloque en la Ronda 1, se adjudicó dos de los 14 contratos petroleros de la Ronda 2.3, a la que también concurrió de manera individual PetroBal, de Grupo Bal, el empresario Alberto Baillères.
También en esta Ronda 2.3, el consorcio mexicano formado por Iberoamericana de Hidrocarburos y Servicios PJP4 se quedó con dos bloques; mientras que el consorcio formado por la china Shandong Kerui Oilfield Service Group y las mexicanas Sicoval y Nuevas Soluciones, se adjudicó tres contratos.
A su vez, la sociedad entre la estadounidense Newpek y la mexicana Verdad Exploration se quedó con dos de los 14 bloques.
caem