Coyoacán tiene una gran riqueza histórica y arquitectónica que podemos apreciar cuando recorremos a pie sus pueblos y barrios conformados por iglesias, construcciones antiguas, casas de cultura, bibliotecas, museos, parques y jardines, entre muchos otros.
Su aspecto tradicional es lo que le ha ganado ser uno de los espacios culturales más importantes de la Ciudad de México, a nivel nacional e internacional. Es por eso que propuse ante el pleno de la ALDF reconocer siete sitios emblemáticos de esta demarcación, para ser nombrados como espacios abiertos monumentales.
Gracias a la voluntad política de los diferentes grupos parlamentarios y a quienes conforman la Comisión de Desarrollo e Infraestructura Urbana, es que hoy Coyoacán ha sido declarado Patrimonio Urbanístico Arquitectónico de la CDMX.
Quiero destacar la importancia de estos espacios abiertos, como el Jardín Hidalgo, espacio de cultura y gran historia, es parte del Centro Histórico de Coyoacán, y la segunda plaza más visitada de la Ciudad de México, sólo después del Zócalo capitalino.
Destacan sus jardineras, pasillos y edificios que datan del tiempo de la Conquista de México y siglos posteriores.
Por otro lado, los panteones de los cinco pueblos de Coyoacán -Los Reyes, La Candelaria, San Pablo Tepetlapa, Santa Úrsula Coapa y San Francisco Culhuacán- forman parte del patrimonio histórico y cultural de la Ciudad de México, y del orgullo de los coyoacanenses.
Los procesos históricos de creación de los panteones comunitarios en la capital tienen rasgos comunes, y no se podría hablar de ellos sin mencionar los cinco pueblos de esta delegación.
Finalmente, la Alameda del Sur constituye uno de los pulmones más importantes de la zona sur de la ciudad; cuenta con una superficie de 122 mil metros cuadrados y fue inaugurada en 1987 para beneficio de la zona sur, aportando un valor ecológico a las colonias aledañas.
La Ley de Salvaguarda del Patrimonio Urbanístico Arquitectónico del Distrito Federal especifica en su artículo primero que las disposiciones de la misma tienen por objeto la salvaguarda de los bienes inmuebles que sean considerados afectos al Patrimonio Arquitectónico Urbanístico de la Ciudad de México, y gracias a que hoy Coyoacán cuenta con siete espacios que conforman este catálogo, se deberá abogar por su conservación y revitalización en beneficio de los capitalinos.
caem