La nadadora española Mireia Belmonte ha asegurado hoy después de conseguir en 200 mariposa el oro en un Mundial, que estaba “súper emocionada y contenta” por colgarse la medalla que le faltaba.
“Esta era la medalla que me faltaba”, ha afirmado la badalonesa, que anteriormente había subido a lo más alto del podio en Juegos Olímpicos y Europeos, pero nunca en un Mundial.
Belmonte ganó en una prueba disputada hasta el último metro. Ha tocado con 2:05.26 por delante de la alemana Franziska Hentke (2:05.39) y de la húngara Katinka Hosszú (2:06.02), plata y bronce, respectivamente.
La nadadora reveló que se levantó “muy enferma” con dolor de cabeza y de garganta, por lo que hasta se llegó a cuestionar qué pasaría en la competencia.
“Pensaba que no sé cómo voy a competir esta tarde. Pero descansé y me he recuperado”, dijo Belmonte, quien admitió que seguramente por ese motivo nadó con menos nervios que antier por la tarde.
“Sabía que tenía la oportunidad de estar en la final de un Mundial y que no todo el mundo puede hacerlo, así que bueno, dije que voy a tirarme y hacer lo mejor que puedo”, destacó sobre las motivaciones que la llevaron a competir pese a su malestar.
“El último 25 me costó, pero lo bonito de estas pruebas es que todo es ajustado”, reiteró la ya campeona mundial, que hasta ahora ganó todo tipos de oros, incluido el Olímpico, menos éste.
Siguiendo el análisis de la carrera, Belmonte enfatizó: “El plan era nadar más valiente que ayer: ir a lo mío y no mirar mucho a los lados”.
“No sabía en qué posición iba, veía solo a la alemana que estaba al lado”, ha afirmado Belmonte, quien considera que lo importante siempre es “simplemente concentrarte en lo que puedes hacer y ya está”.
caem