Luego de que la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) propuso una reforma fiscal que incluya reducir impuestos como el ISR, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) manifestó que en este momento sería un error e incluso una irresponsabilidad considerar una disminución de los ingresos del sector público.
Consideró que las finanzas públicas están en un proceso de consolidación y cualquier propuesta para disminuir los ingresos, en especial de las fuentes recurrentes como los recursos tributarios, en particular el Impuesto Sobre la Renta (ISR), podría revertir la tendencia a la baja que ha comenzado a mostrar la deuda total del sector público.
Una menor deuda contribuye directamente a proteger el poder adquisitivo, manifestó el organismo del Consejo Coordinador Empresarial (CEE) -del cual es parte la Coparmex-, en su reporte Análisis económico ejecutivo semanal.
La semana pasada, el organismo patronal dio a conocer una propuesta de reforma fiscal de 10 puntos, al cuestionar que el gobierno se preocupe sólo por recaudar más, sin ampliar la base de contribuyentes, que se siga exprimiendo a la clase media y que los gobernantes no se comprometan con la transparencia, la rendición de cuentas y el combate a la corrupción.
El dirigente de la Coparmex, Gustavo de Hoyos, planteó la deducción plena de prestaciones laborales; homologar la tasa del ISR a la tasa promedio de los países de la OCDE, que es de 24.66%; el acreditamiento de la retención del 10% del ISR por pago de dividendos a personas físicas; bajar el ISR a personas físicas con ingresos menores a 10 mil pesos mensuales, y mantener la tasa máxima de 35% para los de mayores ingresos, entre otras.
Sin embargo, para el CEESP, los ingresos del sector público han aumentado en los años recientes debido al remanente de operación del Banco de México (Banxico), por lo que para pensar en beneficios tributarios habrá que esperar a que disminuya la deuda y que las fuentes de ingresos recurrentes se hayan consolidado.
caem