El senador Mario Delgado Carrillo afirmó a un diario que “Es un desastre el Metro. Nunca había estado tan mal. Hay que reorganizar la forma en cómo se tiene el financiamiento del Metro con esquemas parecidos a los de la Línea 12, en donde se asegura su mantenimiento, ya que los trenes de esta línea van a estar como nuevos de aquí al 2025 porque así está pactado”.
El senador Delgado Carrillo es el menos indicado para cuestionar la forma de financiamiento del Metro, pues durante su gestión al frente de las finanzas del gobierno del Distrito Federal, igual que ocurrió con las administraciones anteriores, retuvo los recursos presupuestados para el Sistema de Transporte Colectivo (STC) y no los dispuso para la adquisición de refacciones y herramientas a efecto de destinarlas al mantenimiento del Metro.
En cuanto a que el Metro nunca estuvo tan mal, es preciso recordarle que, solamente gracias a la acción de los trabajadores del Metro, este medio de transporte se mantuvo en circulación con relativa seguridad, a pesar de carecer de los implementos necesarios para brindar el mantenimiento de trenes y de instalaciones fijas. En este período quedaron parados cerca de cien trenes por falta de mantenimiento.
Por cuanto hace a su propuesta de disponer para todas las líneas del Metro de un financiamiento parecido al de la Línea 12, habrá que recordarle al senador Delgado que ese financiamiento es el peor negocio que se pudo haber hecho, pues se contrató el uso de 30 trenes a un costo de 1,588.1 millones de dólares (MDD), de los cuales 630.2 MDD corresponden al mantenimiento de esos trenes.
No obstante, se prevé que al término del contrato de pago por servicios (PPS) de 30 trenes, se habrán pagado más del doble del costo de los citados trenes, de los cuales a la fecha se han cubierto 683.6 MDD equivalentes a 9,909.6 millones de pesos (MDP), más 250 MDD (3,041.0 MDP) por concepto de mantenimiento.
Es cierto, al finalizar el contrato de PPS los trenes se quedarán en propiedad del Sistema de Transporte Colectivo, pero serán trenes con más de 15 o 20 años de servicios por los que se habrían pagado más del doble de su costo si fueran nuevos.
Un problema mayor que raya en la ilegalidad es lo previsto en el mismo contrato de PPS, consistente en que se excluye del mantenimiento de trenes a los trabajadores del Metro, desconociendo las disposiciones legales que obligan a los patrones a respetar la materia de trabajo de los trabajadores del Metro, además de que son los que más conocen de Técnica-Metro.
No es posible admitir que los trabajadores del Metro queden fuera del mantenimiento de trenes de la Línea 12, pues al pasar dichos trenes a ser propiedad del STC, le corresponderá a sus trabajadores brindar el mantenimiento respectivo, pero para entonces los trabajadores desconocerán la tecnología con la que funcionan dichos trenes por no haberse familiarizado con la misma.
Hoy la Línea 12 del Metro se lleva un alto porcentaje del presupuesto destinado a todas las demás líneas, lo que indica que su esquema de financiamiento no es el ideal como lo afirma el senador Delgado.
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