Ahora que estamos en el justo momento de las negociaciones, es importante que podamos hacer una reflexión sobre temas que al final podrían ayudar a mejorar las condiciones de vida de los mexicanos, es decir, mejorar la calidad de la sociedad a través de sueldos más competitivos y de un marco de mayor justicia y transparencia, lo que, sin duda, reduciría fuertemente el tema de corrupción que al final son puntos del PIB (miles de millones de pesos) que pueden utilizarse en productos y servicios por parte del gobierno que brinden un mejora hacia la sociedad.

 

Estados Unidos busca reducir el alto déficit comercial con México e incluso con Canadá, cambiar las reglas de origen de la región -especialmente en la industria automotriz- y eliminar prácticas nocivas al comercio en el mercado laboral o en cuestiones de propiedad intelectual, todo ello a favor de la economía estadounidense. El representante norteamericano dice que alrededor de 700 mil personas de Estados Unidos han perdido sus empleos por consecuencia de un TLC mal planteado (pensamiento Trump).

 

Hoy sabemos que para la Unión Americana, un punto débil del TLCAN es la mano de obra que al final ha generado que muchas empresas, especialmente del sector automotriz y de electrónica se ubiquen en México a lo largo de la vida del tratado y han afectado a cientos de miles de empleos americanos.

 

El vecino del Norte quiere que el salario en México sea más competitivo. Existe una urgencia de mejorar condiciones, aunque el costo de hacerlo sería alto en primera instancia, pero en el tiempo seguramente beneficiaría a todos. El tema de productividad entraría a reforzar las condiciones de las variables encaminadas a un mayor ingreso.

 

Actualmente, el PIB per cápita en Estados Unidos es de 57 mil 300 dólares anuales; en Canadá, de 41 mil 900 dólares, mientras que en México, de ocho mil 600 dólares. Midiendo en número de veces, la sociedad americana nos supera en más de seis veces y la de Canadá, en 4.8 veces.

 

Así, en el tiempo sería muy benéfico reducir esta brecha de salarios y generar una mayor calidad de vida.

 

Con respecto al tema de justicia y transparencia, se estará trabajando en programas “anticorrupción” y seguramente serán apoyados por los tres países, situación que ayudará de forma indudable a reducir fuertemente la corrupción irracional en que incurren gobernadores y funcionarios, aunque hay que aclarar que muchos empresarios se prestan también.

 

Los mercados evalúan las minutas de la Fed

Existe una clara preocupación sobre el descenso que ha presentado la inflación en Estados Unidos. Al final, tiene que ver con un consumo limitado que relaciona la oferta y demanda de productos y servicios. Una economía que crece a un ritmo alrededor de 2.0% mantendrá una inflación dentro de los objetivos de la Fed (ligeramente debajo de 2.0% anual).

 

A pesar del aumento de empleos del orden de 180 a 200 mil plazas promedio por mes, éstos son de menor calidad y ante bajas tasas de interés, el uso del crédito se ha incrementado fuertemente, con lo que la disponibilidad de recursos del americano se ha reducido.

 

Por ello, la Fed podría ver posibilidades de nuevos aumento en tasas hasta 2018, siempre y cuando las condiciones de empleo e inflación lo permitan. También será importante conocer en septiembre cómo estarían reduciendo su balance en términos de montos y período. Los mercados aún no lo consideran.

 

 

caem