Entre gritos de «se ve, se siente, Rigoberto delincuente» y un conato de bronca que terminó en una ventanilla de auto rota, Rigoberto Salgado, jefe delegacional en Tláhuac, acudió a la Asamblea Legislativa del DF para recibir por escrito las acusaciones en su contra que dan pie al proceso de destitución realizado en la Comisión Jurisdiccional.

 
Se acordó el jefe delegacional deberá acudir nuevamente a la ALDF el 18 de septiembre, a las 11:00 horas, para defenderse de las imputaciones.

 

Después de sostener una reunión con diputados de Morena, el delegado entró al salón Luis Donaldo Colosio, acompañado de sus asesores y abogado, quienes sortearon las cámaras justo en la puerta del salón, debido a que por motivos de procedimiento, no se permitió la entrada de cualquier aparato de grabación.

 

En punto de las 14:04 horas, los legisladores dieron inicio a la comparecencia. El  presidente de la Comisión Jurisdiccional, Jesús Armando López Velarde Campa, informó a Salgado sobre la entrega de una carpeta que incluye copia de los elementos probatorios sobre las acusaciones, mientras el delegado escuchaba sentado frente de los diputados, en un banquillo que lo dejaba a la vista de los diputados.

 

El titular de la delegación Tláhuac sólo escuchó la orden del día y el motivo de por qué fue citado, para posteriormente recibir una carpeta pesada con al menos dos mil hojas de expediente. Asimismo, firmó un oficio de recibido y después de 15 minutos, salió del salón en medio de flashes y cámaras, a las que se dirigió para decir que analizará los documentos entregados y reiteró que no hay ninguna responsabilidad respecto a lo que se le imputa.

 

ADVERTENCIA

 

En la puerta donde se realizó la reunión de la Comisión Jurisdiccional, se colocó un anuncio para advertir que no se podrá grabar nada de lo ocurrido en la comparecencia, a razón de lo incluido en el Código Nacional de Procedimientos Penales.

 

De lo contrario, se estaría violando el debido proceso del imputado, en este caso, del jefe delegacional.

 

Uno de los artículos en los que se respalda la privacidad de la reunión es el 55, el cual menciona que el Órgano jurisdiccional podrá, por razones de orden o seguridad en el desarrollo de la audiencia, prohibir el ingreso a:

 

  1. Personas armadas, salvo que cumplan funciones de vigilancia o custodia;

 

  1. Personas que porten distintivos gremiales o partidarios;

 

III. Personas que porten objetos peligrosos o prohibidos o que no observen las disposiciones que se establezcan, o

  1. Cualquier otra que el Órgano jurisdiccional considere como inapropiada para el orden o seguridad en el desarrollo de la audiencia.

 

También se sostiene en el artículo 58, sobre los deberes de los asistentes, el cual menciona que “quienes asistan a la audiencia deberán permanecer en la misma respetuosamente, en silencio y no podrán introducir instrumentos que permitan grabar imágenes de video, sonidos o gráficas”.

 

DCA