La administración del presidente Enrique Peña Nieto alcanzará en un par de semanas tres millones de empleos formales generados, cifra que no tiene parangón en la histórica de cualquier administración en el pasado, dijo Alfonso Navarrete Prida, secretario del Trabajo y Previsión Social.

 

Al realizar un balance de los cinco años de gobierno del Ejecutivo federal, dijo que si se sumaran todas las altas al Seguro Social esos casi tres millones de empleos en los sexenios de los expresidentes Ernesto Zedillo, Vicente Fox y Felipe Calderón, juntos no alcanzarían esta cifra que se tiene en estos cinco años.

 

“Estoy cierto que el Ejecutivo federal el sábado dará a conocer resultados que se basan en datos de organismos constitucionales y no necesariamente del gobierno”, expresó en conferencia de prensa.

 

Mencionó que de esos casi tres millones de empleos, 42 por ciento son para mujeres, lo que significa un cambio importante en la disminución de la brecha de género; un tercio son para jóvenes y la mitad de los puestos de trabajo son para personas de más de 40 años.

 

El dato es importante, dijo, porque México atraviesa dos condiciones, la primera un bono demográfico, lo que hace que por la inercia poblacional la mayoría de jóvenes ingrese al mercado laboral por año en los próximos 20 años, en su historia será el mayor número de jóvenes.

 

Planteó que no habrá un periodo igual, “no se va volver a repetir en la historia del país; en este momento 800 mil por año”.

 

Navarrete Prida refirió que van 46 meses prácticamente sin huelgas, el periodo más largo de la historia del país y de cualquier país en el mundo con derecho a huelga; se tiene una disminución de trabajo infantil notable, 700 mil menos de los que había al inicio del sexenio, existe el mayor número de empleados con discapacidad, se rebasó con el doble con respeto al sexenio anterior.

 

En materia de salario mínimo, que es un pendiente, refirió que en estos cinco años el poder de recuperación del salario mínimo es de 12 por ciento, que es contrario al 75 por ciento de pérdida del poder adquisitivo que se dio en los últimos 40 años.

 

“Este dato, si bien es insuficiente, porque se perdió mucho del poder adquisitivo, hemos caminado hacia delante, teniendo paz laboral y un mercado laboral estable”, subrayó.

 

No obstante una condición económica de incertidumbre, dijo, “estamos en condiciones de volver a replantear el tema del salario mínimo en cuanto las condiciones económicas nos permitan saber que la inflación sea estabilizado y que no le generaríamos mayor daño a los trabajadores motivando un aumento en este momento al mínimo que no debe tardar mucho”.

 

El funcionario federal resaltó que se esperará a ver la primera quincena de septiembre, lo medimos cada quincena, para si hay condiciones convocar a los sectores productivos y tener un consenso.

 

Los desafíos que quedan en esta última etapa del gobierno de Peña Nieto son la implementación de justicia laboral, que es el cambio más severo, serio y de importancia que se ha hecho en materia de justicia de trabajo en 100 años, que será más abierto, transparente, rápido y menos costoso para trabajadores y patrones, resaltó.

 

También el cómo se cerrará en materia de recuperación del poder adquisitivo, que deberá ser un sexenio de recuperación de poder adquisitivo, los temas de inclusión laboral e inclusión.

 

“En esta administración no hemos tenido casos tan lamentables como fueron los Pasta de Conchos o la guardería ABC, cuando se mejoran las condiciones de seguridad e higiene mejora la productividad”, planteó.

 

De la negociación de Aeromar, expuso que se está dialogando, y confió en que se tendrá un arreglo, ya hay una contrapropuesta de la empresa que no había existido durante todo este tiempo, misma que la agrupación sindical está valorando, “lo que significa que estamos acercando posiciones”.

 

caem