Con la suma de los fundadores del PRD Ifigenia Martínez y Pablo Gómez, Andrés Manuel López Obrador, presidente nacional de Morena, cerró la firma del Acuerdo por la Unidad y Prosperidad del Pueblo, ante miles de simpatizantes que se congregaron en el Monumento a la Revolución.
“Despacito” fue como describieron la llegada del político tabasqueño, quien -como es costumbre- se abrió paso en la multitud para salir y fotografiarse con sus seguidores hasta arribar al escenario.
Ya en la tarima, se paseó por el frente, la izquierda, la derecha y la parte trasera de ésta para saludar a los presentes, después Alberto Anaya, presidente del PT, se acercó a él, platicaron brevemente y se abrazaron.
Con señas, López Obrador extendió un abrazo a quienes le hicieron quórum en el escenario, entre ellos la senadora Dolores Padierna, quien recién ayer renunció al PRD; sin embargo, sólo se acercó a saludar con beso y abrazo a Bertha Luján, presidenta del Consejo Nacional de Morena, y a Claudia Sheinbaum, recién nombrada coordinadora de organización de la Ciudad de México, y eventual candidata a la Jefatura de Gobierno.
En este cierre, el documento que representa un compromiso por la transformación del país fue rubricado por Ifigenia Martinez, Olga Sánchez Cordero, Dolores Padierna, Raúl Orozco, Carlos Sotelo, María Rojo, Sergio Mayer, Omar Fierro, Pablo Gómez, Teresa Calzada, Karina Barón, Alberto Martínez, Leticia Carrera, Jesús Valencia, René Cervera, Javier García, Alejandro Ojeda , Maricela Contreras , Víctor Hugo Romo, Beatriz Olivares y Socorro Meza, entre otros.
“Vamos todos juntos para lograr la transformación del país, en 10 meses los mexicanos vamos a decidir si mantener al régimen corrupto o buscar la transformación de México. Estamos en momentos definitorios, históricos, tenemos que lograr el renacimiento de México”, fueron las palabras con las que el tabasqueño abrió su discurso.
En los 40 minutos en que cautivó la atención de los presentes, acusó al Presidente Enrique Peña de que advierta que México tendrá una crisis similar a la de Venezuela, de llegar Morena al gobierno.
“Es una pena decir que México sea igual que Venezuela , da pena ajena, es un vulgar calumniador, no tiene ninguna prueba”, calificó.
Además se deslindó de que se inspire en algún gobierno extranjero, pues Morena no toma como ejemplo ni a Nicolás Maduro ni a Donald Trump, sino a los héroes de independencia, los reformistas y los revolucionarios.
Ante la ausencia de Ricardo Monreal, López Obrador externó que Morena va para adelante y ante la definición de la ruta electoral no debe haber disputa por los cargos.
“Tenemos que seguir organizándonos y uniéndonos, no se olvide que el objetivo es la transformación del país, no los cargos, no es la lucha del poder por el poder, no es el quítate tú porque quiero yo, brota la ambición y la calentura, sobre todo si se va a ser candidato a un cargo.
“No sirven los cargos, son un medio, no un fin. Que nos importe hacer historia, no los cargos. No todos son las candidaturas, que no va a haber un director de Pemex, director de la Comisión Federal de Electricidad, un secretario de Educación”, cuestionó.