El gobierno colombiano y el grupo rebelde Ejército de Liberación Nacional (ELN), firmaron ayer un cese al fuego y de hostilidades de carácter temporal y bilateral.
“Este es un hecho de marcada significación histórica: es el primer acuerdo de esta naturaleza que firma el Gobierno Nacional con esta guerrilla en más de 50 años”, señaló el comunicado conjunto suscrito en Quito, Ecuador, sede de las negociaciones de paz.
El cese al fuego que comenzará el próximo 1 de octubre y que se extenderá por 102 días fue anunciado a escasos dos días de la llegada a Bogotá del papa Francisco en una visita pastoral que además lo llevará a Villavicencio, Medellín y Cartagena.
El plan será supervisado por observadores de Naciones Unidas y contará con el acompañamiento de la Iglesia Católica.
“Es muy satisfactorio, por último, poder anunciar este primer paso hacia la consolidación de la paz en Colombia, en las vísperas mismas de la llegada de Su Santidad el Papa Francisco”, enfatizó el comunicado conjunto entre Gobierno y ELN, la única guerrilla activa en Colombia, con más de 2 mil combatientes.
En Bogotá, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, aseguró que la visita del papa Francisco se produce en momentos en que el país sufre grandes cambios y destacó que es propicia para la reconciliación.
“El papa Francisco, cuyas palabras siempre nos alentaron para persistir en la búsqueda de la paz, llegará el próximo miércoles a una Colombia nueva, a una Colombia distinta”, dijo Santos en una declaración desde la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo.
En tanto, el papa Francisco pidió ayer a los colombianos, que se traten como “hermanos, nunca como enemigos”, para cimentar “una paz estable” y “duradera” después de más de cinco décadas de conflicto armado.
“La paz es la que Colombia busca desde hace mucho tiempo y trabaja para conseguirla, una paz estable, duradera, para vernos y tratarnos como hermanos, nunca como enemigos”, aseguró Francisco en un mensaje de video.
Macron apoya a opositores venezolanos
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, recibió ayer al presidente de la Asamblea Nacional venezolana, Julio Borges, y su vicepresidente, Freddy Guevara, en el que, según estos, les transmitió el respaldo “total” al Parlamento, y la disposición de ayudar al país con medicamentos o comida.
Borges indicó a la salida de su cita en el Elíseo que el mandatario les expresó “el apoyo total a la Asamblea Nacional” que ambos representan y les manifestó “su preocupación por Venezuela”.
Antes de ese encuentro, Borges y Guevara mantuvieron sendas reuniones con los presidentes del Senado francés, Gérard Larcher, y de la Asamblea Nacional, François de Rugy.
Larcher se pronunció en favor de la adopción de sanciones por parte de la Unión Europea (UE) contra los “autores de las violaciones de los derechos humanos en Venezuela“.
Estas reuniones son la primera parada de una gira en la que también hablarán con los gobernantes de España, Alemania, Reino Unido e Italia y en la que Guevara sustituye a Lilian Tintori, esposa del líder opositor venezolano Leopoldo López -en arresto domiciliario-, a la que la Fiscalía prohibió salir del país, lo que ha generado nueva críticas al dictador Nicolás Maduro.
caem