El gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, encabezó una reunión con alcaldes de la región de la Costa Grande, para evaluar los posibles daños generados por las lluvias; y en donde hay una atención especial por parte del gobierno del estado y federal hacia los municipios afectados por los fenómenos naturales.
Recomendó a los alcaldes tomar acciones preventivas ante pronósticos de más precipitaciones, porque septiembre, con base a los saldos de los últimos años, es el mes con más potencial de lluvias.
Dijo a los presidentes municipales que establezcan sus equipos de trabajo y mecanismos de prevención para evitar afectaciones mayores; que los síndicos y regidores sean involucrados en las tareas y comisiones para organizar a la población en caso de alguna emergencia.
El gobernador, afirmó, está enterado sobre lo que ocurre en la región de la Costa Grande, por ello, decidió el encuentro con los alcaldes de la zona, para escucharlos de viva voz, porque es importante que tanto el gobierno estatal, como federal tengan el acercamiento con los municipios.
“Yo creo que esto es muy importante que ustedes lo registren que para el gobernador es muy importante esta zona; regresen a sus municipios, denles comisiones a los regidores y síndicos, mándenlos a trabajar, organícense para atender a la población”, les dijo.
Astudillo Flores afirmó que los temas del agua y caminos han sido canalizados de manera concreta a las áreas correspondientes tanto del gobierno del estado, como del gobierno federal.
Reconoció en el encuentro la ardua labor que lleva a cabo la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en las tareas de atención a la población, en limpieza de viviendas y retiro de escombros tanto por los efectos de las lluvias en la zona de la Costa Chica y Costa Grande, como del sismo en la Zona Norte.
El mandatario estatal hizo saber a los presidentes municipales que, es necesaria una atención especial en municipios de la zona Norte, donde más de mil casas han resultado afectadas por el sismo.
Pero también los municipios de San Marcos y Cruz Grande requieren de la atención particular, por las afectaciones ocasionadas por el Huracán Max, donde casi el 80 por ciento de los cultivos de maíz resultaron con daños severos.
dca