El jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, apeló ayer a la unidad de los partidos constitucionalistas en la defensa del Estado de Derecho frente a las acciones secesionistas del Gobierno regional catalán, cuyo presidente, Carles Puigdemont, solicitó la mediación de la Unión Europea (UE).
Rajoy se reunió con el líder del opositor Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, y el liberal Albert Rivera, de Ciudadanos, para analizar la situación ante una posible declaración unilateral de independencia por parte de esa región española tras la celebración del referéndum de autodeterminación declarado ilegal por el justicia y que el Gobierno catalán considera “válido”.
En el encuentro, Sánchez reclamó a Rajoy la apertura de una negociación “de forma inmediata” con Puigdemont, al considerar que “el diálogo es más necesario que nunca”.
También reiteró al presidente del Gobierno español su rechazo a las intervenciones policiales que hubo el domingo y en las que más de 890 personas resultaron heridas, entre ciudadanos y policías, y le anticipó que su partido exigirá “explicaciones y responsabilidades” al Ejecutivo.
Horas antes, el jefe del Ejecutivo catalán pidió una “mediación internacional” para el conflicto catalán “apadrinada por la Unión Europea”.
La Unión Europea tiene que “dejar de mirar hacia otro lado” ante las “violaciones” de la carta europea de derechos fundamentales porque ya no es sólo un asunto interno, sino “europeo”, opinó.
Puigdemont reconoció que no mantiene “ningún contacto” con el Gobierno español, aunque no descartó hacerlo siempre sobre la base de “la voluntad de la gente” de Cataluña.
*edición impresa 24 Horas
caem