Quizá porque lo dice la canción, pero la Luna de octubre también se aprecia más hermosa por los efecto de los cambios que se presentan con la entrada del equinoccio de otoño en el hemisferio norte, cuando las lluvias están por terminar y los vientos son más comunes.

 

Si las condiciones climáticas lo permiten, la noche de este 5 de octubre será posible apreciar la Luna llena en todo su esplendor y dado que en esta época hay ocasos más temprano, desde el atardecer el satélite natural de la Tierra se posará a lo alto del cielo para ser admirado.

 

Esto, porque de acuerdo con la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), cada día la Luna aparece unos 50 minutos más tarde, pero cerca del equinoccio de otoño este tiempo se reduce a los 30 minutos porque el inicio de la estación coincide con una trayectoria orbital del satélite en la que forma un ángulo estrecho con el horizonte nocturno.

 

Así se observa desde la Ciudad de México:

 

 

 

dca