Tras los sismos del mes septiembre en el país las personas pueden presentar estrés postraumático, aunque no hayan sufrido pérdidas importantes, y se expresan con insomnio, indicó Andrés Barrera Medina, especialista de la Clínica de Trastornos del Sueño, de la Facultad de Medicina de la UNAM.

 

“La ocurrencia de los pasados sismos, los edificios colapsados, los decesos y la cantidad de personas que quedaron sin patrimonio son parte de situaciones traumáticas que derivan en estrés y se expresan con insomnio”, señaló.

 

El universitario indicó que luego de un evento traumático son frecuentes las alteraciones del sueño a lo largo de una o dos semanas, después se vuelve a la ‘normalidad’, pero es necesario tener medidas de higiene de sueño, es decir, un horario fijo para acostarse y levantarse, así como realizar actividades relajantes.

 

Alertó que si a más de dos semanas persisten los problemas de insomnio, es recomendable acudir a una clínica especializada, como la de Universidad Nacional, para descartar problemas serios de depresión.

 

Mientras que la población que perdió su patrimonio o a sus seres queridos tendrá mayores inconvenientes, por lo que sugirió buscar ayuda profesional.

 

El especialista aconsejo realizar ejercicios de respiración profunda 20 minutos antes de ir a la cama, apagar las luces y descansar en un sitio libre de ruido, así como evitar noticias de catástrofes, “pues éstas hacen que nos estresemos, lo que interfiere con el sueño”.

 

Otra medida, agrego, es bueno tener algún pasatiempo, reunirse con familiares o amigos, y no preocuparse en exceso, “pues la gente piensa constantemente en la ocurrencia de otro sismo, lo que agrava la situación”.

 

Para las personas que ya padecían depresión, ansiedad o tomaban medicamentos para estas afecciones deben mejorar su calidad de sueño para evitar problemas mayores. Estas recomendaciones también son adecuadas para las personas que apoyan en las brigadas.

 

dca