Un elefante salvaje causó hoy la muerte de cuatro integrantes de la minoría rohingya, incluidos tres niños, en el campo de refugiados en Cox’s Bazar, en el sur de Bangladesh, donde se alojan más de 536 mil personas que han escapado de la violencia y persecución en el norte de Myanmar.
El incidente ocurrió poco después del mediodía de este sábado, en el improvisado campamento ubicado en las colinas de Balukhail, informó el inspector de la policía local, Kay Kislu, quien precisó que las víctimas son una mujer de 30 años, así como tres niños de 11, siete y dos años de edad.
Kislu explicó al sitio web de noticias bdnews24.com que un elefante salvaje irrumpió en el campamento esta tarde, lo que desató el pánico entre los rohingyas que corrieron en busca de protección.
Las cuatro víctimas fueron pisoteadas por el elefante, dos de ellas murieron en el lugar y las otras fueron trasladadas al cercano campo médico dirigido por la organización Médicos Sin Fronteras (MSF), donde sucumbieron por sus heridas.
El inspector de la policía dijo que al menos una docena de personas más también resultaron heridas.
Se trata del segundo incidente de este tipo en un mes, luego de que dos personas murieron pisoteadas por un elefante en el mismo campamento de refugiados.
Miles de rohingyas han escapado del estado de Rakhine, en el norte de Myanmar, perseguidos por las fuerzas de seguridad de ese país desde el 25 de agosto pasado, cuando lanzaron una ofensiva contra los militantes armados de esa comunidad étnica musulmana.
Las agencias internacionales estiman que alrededor de 536 mil personas han cruzado la frontera en el distrito de Cox’s Bazar, en el sureste de Bangladesh, en el transcurso de siete semanas.
Según el grupo de Coordinación Inter de las agencias de ayuda, comandado por la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), un total de 15 mil rohingyas ingresaron a Bangladesh en sólo tres días, del 9 al 11 de octubre pasados.
ot