El secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, afirmó que el aumento en el precio del gas LP se deriva de la caída de los inventarios en Estados Unidos, principalmente, por los efectos del huracán Harvey sobre la infraestructura productora, y también por una mayor demanda de ese hidrocarburo.
Sin embargo, aclaró que el precio de ese energético no es único en el país, sino que está dividido en muchísimas regiones. “Observamos que hay un comportamiento asimétrico. En algunas regiones los precios han bajado menos que en otras y el comportamiento de los precios es en ese aspecto muy desigual y depende principalmente del grado de competencia”.
Al comparecer ante la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados en el marco de la glosa del Quinto Informe de Gobierno, informó que se quiere incentivar la expansión del gas natural. “Un competidor natural del gas LP es el gas natural”.
Pidió la ayuda de los legisladores, pues las redes domiciliarias para distribuir ese energético en las distintas entidades del país se atoran en los ayuntamientos o en las delegaciones.
Según el funcionario federal, la caída de la producción de crudo en el país no empezó con la reforma energética, sino desde 2004, y se debe principalmente a la declinación del yacimiento súper gigante de Cantarell, que empezó en ese año y que prooprcionaba 62 por ciento de la producción de crudo.
La reforma energética surge para frenar esa declinación. “Pero quienes conocemos esa industria, sabemos que una industria petrolera es de plazos largos y extensos periodos de maduración”, añadió.
“Si queremos frenar la declinación, tenemos que ir ahora a una diversidad de empresas, a una variedad de segmentos, ya no sólo en un yacimiento; tenemos que repartirnos en aguas profundas, someras, en campos terrestres convencionales, hacer recuperación mejorada, hay que ir a los campos no convencionales”, detalló.
Ya se ven los resultados iniciales de la reforma, ya se tienen los primeros bloques asignados en la ronda 1.1 y 1.2. De cinco bloques asignados, cuatro han reportado comercial y, seguramente, habrá un fruto muy importante en el año, frenar el decrecimiento de la tasa de restitución de reserva.
Con lo hecho por Petróleos Mexicanos (Pemex) más el esfuerzo de las empresas privadas, habrá ese gran fruto de la reforma el año próximo, destacó.
Esa reforma, enfatizó “le quitó la camisa de fuerza a Petróleos Mexicanos”, que le había impuesto el viejo modelo, pues Pemex era la única petrolera del mundo que no podía asociarse, que es la práctica más extendida en el mercado internacional de crudo; ahora lo puede hacer y con muy buenos resultados.
En dos años y con un enorme éxito, se han logrado siete licitaciones y tres alianzas estratégicas de Pemex y los resultados son muy positivos, pues el modelo licitatorio es robusto y con altos índices de transparencia, detalló el funcionario federal.
Se han asignado 72 nuevos contratos. De las 97 áreas ofertadas en las licitaciones, en siete de ellas se ha adjudicado 74 por ciento.
“Algo que es muy motivante porque hemos logrado porcentajes de utilidad para el Estado, promedio de 74 por ciento. Es decir, sin invertir un solo centavo, el Estado se llevará 74 por ciento de la utilidad de estos proyectos siempre y cuando tengan éxito en la extracción comercial”.
Sobre las nuevas inversiones, son 80 mil millones de dólares que llegarán al país, y antes de que termine el sexenio esta cifra será de 100 mil millones de dólares, mencionó.
En síntesis, afirmó, la reforma energética generó el nacimiento de un sistema industrial diversificado; se crea un clúster de desarrollo regional y cadenas de valor en infraestructura; un Pemex más competitivo, que gana contratos y concreta asociaciones con grandes petroleras mundiales.
Además, 26 entidades estarán, a finales del sexenio, en vías de acceder al gas natural o ampliar su oferta; se fortalece la seguridad energética; los consumidores ganan al elegir entre diferentes marcas y servicios de gasolineras; se realiza la mayor inversión de la historia en proyectos de electricidad limpia, afirmó.
De igual modo, la mitad de los estados tendrán al menos un nuevo proyecto de electricidad limpia antes de 2019; habrá acceso a la electricidad para 1.8 millones de mexicanos en condiciones de vulnerabilidad, y se democratiza el acceso a la energía eléctrica a través de la generación distribuida, como paneles en los domicilios de las casas.
JMSJ