La defensa del mexicano Rubén Ramírez Cárdenas, condenado a muerte en Estados Unidos, interpuso dos apelaciones de última hora ante la Suprema Corte de Justicia, que mantienen en suspenso su ejecución, programada para la noche de este miércoles.

 

Las apelaciones, sustentada cada una en documentos de más de 20 páginas, han forzado a las autoridades de Texas a retrasar la ejecución del mexicano, originalmente programada para las 18:00 hora local de este miércoles (00:00 GMT del jueves).

 

Texas no puede proceder a la ejecución hasta que la Suprema Corte se pronuncie sobre las apelaciones.

 

El director del Programa de Protección a Mexicanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, Jacob Prado, explicó aquí que una de las apelaciones pide realizar nuevos análisis de ADN a evidencia física, que exoneraría a Ramírez Cárdenas.

 

La segunda apelación es un documento que expone técnicamente por qué se debe proceder a un nuevo análisis de ADN, explicó Prado.

 

La defensa también interpuso una petición al máximo tribunal judicial del país para que se posponga la ejecución con base en esas dos apelaciones, indicó el funcionario.

 

Texas tiene autorización para realizar la ejecución hasta la medianoche de este miércoles, y si la Suprema Corte no se pronuncia para entonces, su aplicación deberá posponerse hasta que las autoridades carcelarias tengan una nueva autorización.

 

Ramírez Cárdenas, de 47 años de edad y originario de Irapuato,  Guanajuato, fue sentenciado a muerte por la violación y muerte de su prima hermana Mayra Azucena Laguna, de 16 años de edad, cometidas el 22 de febrero de 1997 en la comunidad de Edinburg, en el sur de Texas.

 

JMSJ