Al menos cuatro personas murieron hoy y 500 resultaron heridas en la región iraquí del Kurdistán, cerca de la frontera con Irán, a causa del terremoto de 7,2 grados en la escala de Richter registrado en la zona, que también provocó víctimas en el país vecino.
Las cuatro víctimas se registraron en la localidad de Darbandiján, ubicada en la provincia kurda de Suleimaniya, una zona montañosa en el noreste de Irak a pocos kilómetros de la frontera iraní, según informaron responsables locales citados por medios iraquíes.
El Gobierno de la región autónoma del Kurdistán, informó de que hay víctimas mortales, sin precisar su número, y “más de 500 heridos” en la provincia de Suleimaniya.
El ministro iraquí de Recursos Hídricos, Saad al Yanabi, informó de que se produjeron deslizamientos de tierra en una montaña cercana a la presa de Darbandiján como resultado del terremoto, aunque por el momento, debido a la oscuridad, se desconoce si se han producido daños.
No obstante, aseguró que no se han registrado daños en la presa de Hamrin, que está cerca de Darbandiján, lo que resulta “tranquilizador”.
El seísmo se produjo a las 21.18 hora local (18.18 GMT), cerca de la ciudad iraquí de Halabya, en la región de frontera con Irán, y a una profundidad de 33,9 kilómetros, según datos del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
El servicio de terremotos iraquí afirmó que el temblor fue de entre 7,2 y 7,6 grados y tuvo su epicentro en Suleimaniya.
caem