Modificar un convenio comercial de la magnitud e importancia del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) perjudicaría a los gobiernos de México y Estados Unidos, afirmó el secretario de Agricultura, José Calzada Rovirosa.
Sin embargo, el funcionario federal argumentó que los más afectados serían los consumidores, porque al final podrían tener productos más caros o sustituir importaciones con alimentos que no tienen la misma calidad que los de México.
Durante la ceremonia inaugural de la Expo Agroalimentaria 2017, que encabezó junto con el gobernador de Guanajuato, Miguel Márquez Márquez, resaltó que el sector agroalimentario está en una posición de fortaleza y hoy sus productos llegan a más de 150 países, lo cual incide en el crecimiento de este sector que hoy es vital y estratégico para la economía nacional.
De terminar el TLCAN, sostuvo que quien perdería más sería el consumidor, porque de operar las reglas de la Organización Mundial de Comercio (OMC), el país que tendría que pagar más aranceles por productos agroalimentarios sería Estados Unidos.
“No queremos privilegios en el marco del tratado, queremos la razón de la competencia, que hoy tiene a México un paso adelante en el mundo”, indicó el titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) en un comunicado.
“Nos hemos convertido en el décimo segundo productor de alimentos y en el décimo exportador, por eso tenemos muchas cosas de las cuales hablar y qué presumir, principalmente de nuestra gente que se esfuerza y que trabaja”, enfatizó.
Calzada Rovirosa resaltó que de 25 millones de personas del sector rural del país, siete millones trabajan en el campo, y este año, por primera ocasión, con cifras también históricas se exportarán productos por 33 mil millones de dólares y se tendrá un superávit cercano a los cuatro mil millones de dólares.
Reconoció que la negociación para la modernización del TLCAN ha sido compleja debido a las cuestiones propuestas, “evidentemente no satisfacen a la parte mexicana en lo que tienen que ver con el sector agrícola, por eso vamos a defenderlo porque es cuestión de principios”.
En la víspera de la quinta ronda de renegociación, el funcionario federal recordó que una de las propuestas inaceptables para el gobierno mexicano, por ejemplo, es la temporalidad, donde se planteó que cuando en Estados Unidos estén cosechando algún producto, entonces México tendría una cuota o un impuesto qué pagar para exportar.
“El espíritu del TLCAN es el libre comercio y no pueden establecerse beneficios para unos y perjuicios para los otros”, manifestó.
ot