A falta de más de un mes para la Navidad, miles de mexicanos inundan los centros comerciales en busca de regalos a bajos precios. Y es que ha llegado el “Buen Fin“, el fin de semana con los mayores descuentos del año.
Desde este viernes y hasta el próximo lunes muchos madrugarán para que sus bolsillos puedan ahorrar el máximo de dinero, como es el caso de Danae, quien entró esta mañana a un gran almacén en el barrio de Polanco y salió tres horas después abarrotada con cinco televisores y varios computadores.
“Hemos aprovechado para comprar los regalos de Navidad“, explicó algo ilusionada Danae, tras ahorrarse más de 2.000 pesos (106 dólares) por cada televisor.
Los tradicionales atascos de la capital mexicana se trasladaron hoy al interior de los centros comerciales y los grandes almacenes, donde circular con los carritos de la compra suponía grandes dificultades debido a la gran afluencia de gente.
Sin embargo, las cajas trabajan a pleno rendimiento para tratar de agilizar las compras.
Eugenia se mostró muy satisfecha porque tuvo que esperar “poco tiempo” para poder llevarse su nuevo televisor a un precio “económico y accesible”, y se declaró una incondicional de este fin de semana de descuentos en productos y servicios.
“Desde que empezó el ‘Buen Fin‘ he tratado de aprovechar año tras año las ofertas que hay”, declaró.
El “Buen Fin” fue implementado por primera vez en 2011 mediante la colaboración del sector público y empresarial, que establecieron un programa de ambiciosos descuentos para fomentar una fiesta del consumo que coincide con el “Black Friday” estadounidense.
Eugenia trabaja en una constructora que participa en el proyecto del nuevo aeropuerto capitalino y, junto a tres compañeros del trabajo, se tomaron la mañana libre para llenar tres carritos con electrodomésticos que serán sorteados en la rifa navideña de su empresa.
“Consolas, batidoras, máquinas de planchar y otros objetos a un 30 % de descuento”, contó Eugenia, quien reconoció que el “Buen Fin” ya es una tradición en su compañía.
Algo similar hacen en el trabajo de Javier, que explicó que cada año emprenden una ruta por distintos centros comerciales con el objetivo de “comprar muchos regalos para los empleados y aprovechar las promociones” en aspiradoras, material de cocina y pantallas táctiles.
Sin embargo, Javier confesó que a título personal no suele realizar compras durante el “Buen Fin” puesto que no encuentra suficientes descuentos en algunos productos como muebles, por lo que se esperará a diciembre o a enero “cuando haya bajado esta euforia”.
Y es que no todo el mundo comulga con la fiesta del consumo de este fin de semana. Es el caso de Rebeca, quien confesó que hace años que dejó de fijarse en las ofertas del “Buen Fin“.
“Si observas, no hay descuentos en los productos básicos. Prácticamente todos los descuentos son para tecnología”, lamentó tras hacer 15 minutos de cola para comprar unos paquetes de jabón.
El Gobierno mexicano declaró el mes pasado que la campaña del “Buen Fin 2017” sería “clave” para la reactivación de la economía de las zonas afectadas por los terremotos de este año. Viendo la enorme afluencia de compradores, parece que podría cumplirse este objetivo.
dca