El presidente Enrique Peña Nieto celebró el incremento al salario mínimo, y señaló que no se trata de un ajuste menor, pues en los últimos cinco años ha tenido una recuperación del 20 por ciento en términos reales.
“Celebro que esta mañana el consejo de representantes de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami), haya decidido incrementar el salario mínimo de 80.04 pesos 88.36 pesos”, expresó el mandatario.
Durante la ceremonia para poner en marcha las acciones para el fortalecimiento del empleo, dijo que “no se trata de un ajuste menor, sobre todo considerando que al inicio de esta administración, hace prácticamente cinco años, el salario mínimo era de apenas 60 pesos”.
En el salón “Adolfo López Mateos” de la residencia oficial de Los Pinos indicó que con este aumento, en los últimos cinco años, el salario mínimo a tenido una recuperación de 20 por ciento en términos reales, “esto es 45 por ciento en términos nominales, lo cual no había ocurrido hace más de 30 años”.
Explicó que en contexto, esta alza contrasta de forma drástica con la pérdida del poder adquisitivo de 21 por ciento en términos reales, que se registró en los 18 años de las tres administraciones pasadas.
El salario mínimo debe ser una retribución justa, “y después de décadas de rezago, ya estamos avanzando en esa dirección, con responsabilidad y sobre todo, asegurando un ritmo constante y permanente que permita mantener la estabilidad económica, de nuestra macroeconomía, baja tasa de inflación, y al mismo tiempo un mejor salario para los trabajadores”.
Destacó el “triple récord” alcanzado en la generación de empleos que, aseguró, es un logro colectivo resultado de la suma de voluntades, de esfuerzos de trabajadores, de empresarios y del gobierno.
Acompañado por el secretario del Trabajo, Alfonso Navarrete Prida, del gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, y mandatarios estatales, aseveró que “los logros de los que hoy hemos hablado, son una prueba de que la transformación del mercado laboral está en marcha”.
Añadió que estos avances confirman que es posible conciliar la estabilidad económica con el crecimiento de los empleos y la mejora sostenida de los salarios: “Se trata de un cambio estructural, que bien conducido en los siguientes años, permitirá seguir creando más empleos formales para las familias mexicanas”.
Destacó que el fortalecimiento del empleo inició en noviembre de 2012 con la reforma laboral, que sentó las bases de un mercado de trabajo más dinámico, flexible e incluyente, y la primera de seis reformas en materia económica encaminadas a incrementar la productividad y la competitividad, elementos necesarios para la generación de empleos de calidad y bien remunerados.
“Desde entonces, la economía crece de manera sostenida, pues por primera vez en 23 años, el Producto Interno Bruto (PIB) a aumentado a tasa anual en todos los trimestres de una misma administración. Este crecimiento se ve reflejado en lo que he llamado el triple récord en la generación de empleo”, enfatizó.
En octubre se crearon 195 mil empleos, la cifra más alta para cualquier mes en nuestra historia; se generaron más de un millón de empleos en los primeros 10 meses del año, y en cinco años se han creado más de tres millones 330 mil empleos, enumeró.
“Esta cifra supera lo alcanzado, como aquí se ha referido, en cualquier sexenio completo. De continuar con esta tendencia, lograremos generar más de cuatro millones de empleos en esta administración”.
Peña Nieto subrayó que estos logros han sido posibles gracias a cinco factores, como la estabilidad macroeconómica, a partir de finanzas públicas sanas y una política monetaria responsable.
En este contexto, reconoció el trabajo de Carstens Carstens al frente del Banco de México, y dijo que su profesionalismo y rigor técnico han contribuido de manera decisiva a preservar nuestra estabilidad económica, generando confianza y certidumbre en los mercados.
El segundo factor decisivo para la generación de empleos, es la inversión del sector privado, y destacó que en lo que va de la administración, el país ha recibido 156 mil millones de dólares de inversión extranjera directa, superando el monto recibido durante cualquier sexenio completo.
“Aún más significativo es la inversión realizada por los empresarios mexicanos”, pues en 2017, los miembros del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) comprometieron tres billones y medio de pesos en proyectos productivos.
De igual manera, las reformas estructurales y su impacto en distintos ámbitos de la economía; la inversión en infraestructura de telecomunicación, transporte y servicios públicos, y el quinto factor, que son las políticas públicas en favor de la formalidad laboral.
El jefe del Ejecutivo federal subrayó que “sólo trabajando juntos se puede impulsar la formalidad, propiciar una mayor inclusión laboral y continuar generando empleos dignos y bien remunerados para las familias mexicanas”.
ot