A tres meses del inicio de las conversaciones para modernizar el TLCA, los negociadores no han logrado cerrar un solo capítulo. Ayer, Estados Unidos se dijo preocupado por la falta de avances y alertó a sus socios del riesgo de “no alcanzar un resultado satisfactorio”; México, por separado, descartó el estancamiento de las pláticas, pero apuntó al desconocimiento que se advierte en la propuesta estadounidense sobre reglas de origen.
“Hasta el momento, no hemos visto evidencia de que Canadá o México estén dispuestos a comprometerse seriamente con disposiciones que conduzcan a un acuerdo reequilibrado (esto en relación con el déficit comercial de EU). En ausencia de esto, no alcanzaremos un resultado satisfactorio”, sentenció en un comunicado fechado en Washington, el representante de Comercio de EU, Robert Lighthizer, minutos después de la declaración trilateral al concluir la quinta mesa.
Consultado al respecto en el Club de Industriales, en la Ciudad de México, el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, respondió que el país está constructiva y seriamente comprometido con esta renegociación. Sobre el “rebalanceo” del comercio que EU pretende lograr a través de nuevas reglas de comercio, el funcionario reiteró que existe disposición para lograr esto, pero siempre a través de la expansión del intercambio en América del Norte.
México, agregó, considera que sí es necesario aumentar el contenido regional en América del Norte, “pero la propuesta que está sobre la mesa y que llegó 48 antes del cierre de la ronda anterior, despierta muchas dudas. La primera, un periodo de transición para pasar del 62.5% al 85% en tres años e ir avanzando hacia 2018 y 2019, parece desconocer que la industria automotriz ya tiene hecho el modelo 2018 y prácticamente el 2019”.
En el tema automotriz, la mayor parte del tiempo, en esta ronda, se dedicó a pedir a EU una explicación técnica que fundamente su demanda, a partir de la cual México podrá generar una contrapropuesta, precisó.
Cuestionado sobre los avances, consideró que estos fueron importantes y existe “un conjunto de capítulos que están a punto de cerrarse”, como los de comercio electrónico, medidas sanitarias y fitosanitarias, mejore prácticas regulatorias, medio ambiente, facilitación comercial en aduanas, medidas anticorrupción. Es decir, los mimos que ya había señalado en las rondas previas por su grado de madurez.
Sin embargo, reconoció que la conclusión de estos capítulos depende de la “voluntad política” de hacerlo, lo cual, según dijo, podría ocurrir incluso antes de la quinta ronda, que contará con la presencia de los ministros, programada del 23 al 28 de enero de 2018.
México, dijo, ha hecho contrapropuestas serias y muestra de ello es la de evaluación quinquenal, en respuesta a la “muerte súbita” que plantea EU.
“No nos pongamos nerviosos”, dijo al rechazar que exista un estancamiento en la negociación. “Es un proceso complejo (…), nos gustaría que cerrara constructivamente, pero también estar listos para un escenario donde no necesariamente haya una conclusión”.
En una declaración trilateral de tres párrafos por el cierre de la ronda, los tres país señalaron “avances en varios capítulos”, aunque no precisaron cuáles.
Los ministros acordaron una sexta ronda para enero próximo en Montreal, Canadá, mientras que los equipos negociadores continuarán sus trabajos en reuniones intersesionales en Washington, D.C. a mediados de diciembre y reportarán los avances obtenidos a los jefes negociadores.
“Nuestros equipos se reunirán nuevamente el próximo mes en Washington. Espero que nuestros socios se pongan a la mesa de manera seria para que podamos ver un progreso significativo antes de fin de año”, apuntó el comunicado de Lighthizer.
*edición impresa 24 Horas
caem