La Organización del Tratado de Prohibición Total de Pruebas Nucleares (CTBTO, integrada en el sistema de la ONU)) informó hoy de “una señal inusual en las cercanías de la última posición conocida del submarino argentino desaparecido ARA San Juan”.

 

Dos estaciones hidroacústicas de la CTBTO detectaron “un evento impulsivo subacuático” que ocurrió a las 13.51 GMT del 15 de noviembre en la latitud -46,12 grados y la longitud -59,69 grados, indicó ese organismo de la ONU, con sede en Viena.

 

En Buenos Aires la Armada Argentina aseguró hoy que el día en el que se perdió el contacto con el submarino, en el que viajaban 44 tripulantes, se registró en la misma zona un “evento anómalo singular corto, violento y no nuclear consistente con una explosión”.

 

La CTBTO agrega en su corto comunicado de apenas tres párrafos que sus “datos se ponen a disposición de las autoridades argentinas para apoyar las operaciones de búsqueda en curso”.

 

La Armada de Argentina ha indicado que apenas tres horas después de perder la comunicación con el sumergible, se detectó una “anomalía hidroacústica” o “ruido” cerca de donde se reportó por última vez su ubicación, en la zona del Golfo San Jorge, a 432 kilómetros de la costa argentina.

 

El CTBTO cuenta con una red mundial de unas 300 estaciones de medición, repartidas por todo el planeta, con la que detecta en tiempo real cualquier detonación o explosión inusual que puedan apuntar a un posible ensayo nuclear.

 

Los sensores del CTBTO han sido fundamentales en los pasado años para determinar si Corea del Norte había llevado a cabo pruebas nucleares.

 

La red de estaciones de la CTBTO tiene la capacidad de recoger datos sísmicos, hidroacústicos y de infrasonido, lo que las hace imprescindibles para reaccionar con celeridad ante un tsunami, detectar partículas radiactivas o una potencial erupción volcánica.

 

El CTBTO es un organismo independiente dentro de la ONU que vigila el cumplimiento del Tratado para la Prohibición de las Pruebas Nucleares, firmado en 1996.

ot