A punto de cumplirse la última fecha para la liberalización de los precios de los combustibles, sólo dos gasolinerías en el país, concretamente en Tijuana, Baja California, comercializan gasolina distinta a la que vende Pemex.
Esas dos estaciones de la marca ARCO fueron inauguradas en los primeros días de septiembre y son operadas mediante una alianza entre ProFuels y la estadounidense Andeavor, antes Tesoro, la única empresa privada autorizada hasta ahora para utilizar la infraestructura de transporte por ductos y de almacenamiento de Pemex.
La empresa resultó ganadora en la primera y única Temporada Abierta concretada por Petróleos Mexicanos, de las cinco programadas para este año, conforme avanzara el calendario de flexibilización de precios de los combustibles.
Andeavor firmó en mayo los contratos con Pemex y después inició la importación de combustibles desde sus refinerías en la Costa Oeste de Estados Unidos, primero por tierra y, desde octubre, a través de buques que descargan en la terminal de Rosarito, en Tijuana.
De acuerdo con Marcial Díaz, analista del sector energético de Lexoil Consultores, se refirió a la flexibilización de los precios que se dará la próxima semana en 23 entidades del centro, bajío y península de Yucatán, pero sin el desarrollo logístico planeado.
Ya está liberado 35% del mercado y falta 65%, pero el calendario también incluía temporadas abiertas por cada una de las zonas. “Si tenemos un poquito de memoria, la única que hoy está operando es la primera, la cual tuvo un retraso de varias semanas. La CRE dice que seguimos en este camino, pero lo que no hemos visto en 11 meses no lo vamos a ver en las semanas que faltan para que termine el año. Entonces es poco probable que veamos temporadas abiertas”, dijo durante su reciente participación en el XXIII Foro de Transformación Industrial organizado por el Instituto Mexicano del Petróleo.
El ex colaborador en áreas jurídicas de las distintas subsidiarias de Pemex consideró que la reforma en el sector se ha adelantado más por cuestiones políticas que por condiciones de mercado; “al final, Pemex sigue siendo el único proveedor de molécula en el país”, subrayó.
Sobre la presencia de al menos 25 nueva marcas que ahora abanderan algunas estaciones, indicó que estas dejan la franquicia Pemex, pero continúan con un contrato de comercialización o de suministro con la petrolera.
“Con la liberalización deberíamos empezar a ver que las marca jueguen con los precios, pero no puedes hacerlo hasta que no tengas varios oferentes de la molécula”.
En el tema del transporte de combustibles, señaló que si bien también ya está liberado a partir de este año, lo cual supone que cualquier empresario puede entrar a la terminal y cargar, “la realidad es que si no estás arreglado con el sindicato (petrolero) no puedes entrar”.
El sindicato, señaló, no ha sido un actor preponderante, ha sido un actor que nos ha costado trabajo que nos acompañe en este proceso.
En concreto, el único combustible distinto a Pemex se vende en dos estaciones de servicio en Baja California, en Tijuana. “Primero traían combustible en pipa desde Los Ángeles, ahora que trajeron su primer buque tardó más del tiempo establecido para poder descargar en Rosarito, y hubo problemas sindicales porque los trabajadores no dejaban entrar a la terminal”.
En su opinión, a Pemex le ha costado borrar 80 años. “Al parecer ya lo entendió, lanzó su nueva imagen de la franquicia y dijo que ya no es regulador, que sólo es un agente comercial, y que además es tu socio y como tal te va a acompañar en tu modelo de negocio”.
Al plantear los retos para 2018, se refirió a los permisos de importación, que si bien estaba programada para finales de este año se adelantó al 1 de abril de 2016. Al 23 de octubre de este año hay 233 autorizaciones para traer gasolinas del exterior y 341 para diésel, pero que resultan inoperantes por la cantidad de trámites que deben concretar los interesados.
Según confirmó hace unas semanas el comisionado presidente de la CRE, Sergio García Alcocer, la importación por parte de privados es de 6.0% del consumo nacional y en gasolinas de casi 1.0%.
*edición impresa 24 Horas
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