Diputados federales pidieron que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) atienda las observaciones de habitantes de municipios mexiquenses relacionadas con la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
El presidente de la Comisión Especial de Seguimiento a la Construcción del nuevo aeropuerto de la Cámara de Diputados, Rafael Hernández Soriano, pidió a la SCT efectuar una visita a la zona y tomar las acciones pertinentes, en particular sobre el lodo que se extrae de la obra de la terminal aérea.
El legislador opinó que un estudio de impacto ambiental permitiría guardar el equilibrio entre el desarrollo económico y social y las afectaciones que signifiquen la realización de una obra.
Sostuvo que los legisladores tienen la facultad de hacer que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) continúe la supervisión periódica y permanente del proyecto. “Sabemos de las complejidades, deficiencias, alcances humanos y materiales, pero no debemos renunciar a esta potestad”, dijo.
A su vez la diputada Paz Quiñones Cornejo, del PRI, subrayó que las mesas de trabajo son la forma adecuada de comunicación entre los actores involucrados, ya que pueden propiciar respuestas rápidas y expeditas.
En tanto la legisladora Claudia Sánchez Juárez, del PAN, llamó a atender las observaciones de los vecinos sobre los impactos de la construcción del nuevo aeropuerto.
Por su parte el subdirector de Medio Ambiente y Sustentabilidad del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, Alejandro Virchez González, aclaró que el proyecto aeroportuario sí tiene manifestación de impacto ambiental y da cumplimiento estricto a lo que mandata la autoridad.
Aseguró que los lodos que se extraen no contaminan. “Un lodo, per se, es un remanente del proceso de una planta de tratamientos de residuos del que se deriva una serie de contaminaciones, pero Grupo Aeroportuario no tiene planta de tratamiento y lo único que está saliendo son arcillas mojadas, porque hay humedad”.
Entre otros aspectos, pidió revisar si los desperdicios son del grupo aeroportuario porque “hemos detectado que han llegado a los tiraderos material que no es del grupo”.
Julián Bernal Iturriaga, asesor del Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México en materia de transparencia, destacó que en este proyecto de infraestructura se ha hecho un esfuerzo importante por transparentar la contratación, y aseguró que se han publicado 321 documentos.
Comentó que Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México produce muchos informes para distintas instancias de gobierno y auditores.
Por su parte Mariana Campos, coordinadora del Programa de Gasto Público y Rendición de Cuentas de México Evalúa, presentó el documento “Indicadores de la construcción del NAICM”.
Señaló la conveniencia de que el consorcio aeroportuario realice un informe periódico del proyecto y del avance físico y financiero, así como de sus contrataciones y de los principales riesgos y estrategias para superarlos.
También exhortó a analizar cómo fortalecer la toma de decisiones de la modificación de contratos, para incorporar el aprendizaje internacional de los proyectos exitosos y tener un mejor control de los riesgos de corrupción que puedan ocurrir.
Propuso establecer una mesa de trabajo integrada con diversos actores, ya que permitiría eliminar asimetrías de información y considerar una agenda específica para ordenar la conversación sobre los temas de interés y responder a las dudas.
En la reunión vecinos de Tlamilca, Tezoyuca y Tepetlaoxtoc expresaron su inconformidad porque la construcción del nuevo aeropuerto, según ellos, “está afectando a ocho regiones de los alrededores con la contaminación que genera el lodo que se extrae”, entre otros aspectos.
ot