Desde la aprobación del dictamen de la Ley de Seguridad Interior (LSI), en Comisiones, la oposición se sabía derrotada.
Por eso varios senadores del PAN no tuvieron empacho en comentar que los gobernadores estaban siendo presionados por el propio Ejército para que los legisladores de estados con presencia de las Fuerzas Armadas en sus calles, votaran a favor.
La administración de Felipe Calderón dejó nueve estados con “bandera roja’’, es decir, con presencia militar en sus calles.
Ahora hay 27 estados en esa situación, entre ellos Durango, cuyo gobernador, el panista José Rosas Aispuro, pidió “encarecidamente’’ a los senadores de su partido votar a favor del dictamen.
“Si no, el Ejército se retira del estado y entonces cómo vamos a combatir al narco’’, les dijo.
Pero en el PAN, de 38 senadores, por lo menos 25 estaban seguros de votar en contra del dictamen; sólo los llamados “rebeldes’’ y algunos otros, como el colimense Jorge Luis Preciado, votarían a favor.
Preciado, que fue coordinador de la bancada panista, dijo que en su estado hasta los aseadores de calzado tienen que pagar 20 pesos diarios de derecho de piso, que son extorsionados abogados, médicos, ingenieros, ganaderos, etcétera, sin que el Gobierno estatal pueda hacer frente al cártel que ha tomado como rehén a la entidad.
En el debate quedó la duda sobre la interpretación sobre la definición de seguridad interior contra la de seguridad pública y la seguridad nacional; ¿no son lo mismo? ¿Jurídicamente tienen un trato diferente?
Al cierre de este espacio, entrada la noche, continuaba el debate en el Senado, pero se daba por descontado que, tratándose de la votación de una minuta sin reforma constitucional, es decir, que se requería del voto a favor de 50% de los legisladores presentes en la sesión más uno, el documento sería aprobado.
Será, como dijo un senador, el triunfo del miedo.
La novedad en el gabinete de Andrés Manuel López Obrador fue que la ex ministra de la Corte, Olga Sánchez Cordero, haya sido colocada como futura secretaria de Gobernación.
Y es que, según la ahora líder de Morena, Yeidckol Polevnsky, en Gobernación el dueño del partido vislumbraba a Ricardo Monreal Ávila, quien no estuvo presente en el anuncio y quien no figura en ésta que es la alineación inicial del equipo del tabasqueño.
Bueno, ni siquiera el empresario Alfonso Romo que le ha servido de valet en todooo el tiempo que lleva de campaña figura en el gabinetazo.
Será interesante conocer en las encuestas que se realizarán para tal efecto cómo recibió la sociedad a los hombres y mujeres que podrían gobernar el país a partir de diciembre de 2018.
Pues con la novedad de que nuevamente fue boicoteado el nombramiento del auditor superior de la Federación en la Cámara de Diputados.
Ayer le comentamos en este espacio que ya se había dado un consenso a favor de Juan Javier Pérez Saavedra, pero algo pasó en el transcurso de la mañana, previo al inicio de la accidentada sesión de los diputados, que reventó el acuerdo.
Así que no habrá auditor superior, sino un interino, a menos que la Comisión Permanente lo nombre.
Pero no habrá problema porque la ley prevé quién será el sustituto temporal de Juan Manuel Portal que concluye su periodo el día último de este año.